Luz ahora 0,09637 €/kWh
EL IDIOMA DE LAS CAMPANAS por el alumno 5901 de Quintanilla Sobresierra
Llamada a misa dominical con tres series y torneo: primera con 25 campanadas seguidas y una retardada, volteo de campanas,, segunda con 25 campanadas mas dos retardadas y tercera o entrar con tan solo tres campanadas. En días de fiesta mayor el volteo de campanas se hacía tres veces con un pequeño intervalo. También tenemos la llamada a misa y rosario los días de entre semana con la serie de tres llamadas sin volteo. Los sábados al atardecer una sola llamada a confesiones.
Intentaré recordar la serie de toques imprevistos poniendo el sentimiento que el campanero de turno hacía: difuntos, era un toque estremecedor. Un golpe seco y fuerte de las dos campanas mayores a la vez. Se conocía como clamor. Tres clamores si el difunto era varón. Dos clamores si se trataba de una mujer. Cuatro si era un clérigo. A continuación de los dos o tres clamores se producía un tin-tan con las dos campanas, comienzo lento, ritmo "in crescendo" hasta confundirse hasta confundirse ambas campanas, de nuevo descendiendo el ritmo y al final rematado con los clamores correspondientes.
Llamada a misa dominical con tres series y torneo: primera con 25 campanadas seguidas y una retardada, volteo de campanas,, segunda con 25 campanadas mas dos retardadas y tercera o entrar con tan solo tres campanadas. En días de fiesta mayor el volteo de campanas se hacía tres veces con un pequeño intervalo. También tenemos la llamada a misa y rosario los días de entre semana con la serie de tres llamadas sin volteo. Los sábados al atardecer una sola llamada a confesiones.
Intentaré recordar la serie de toques imprevistos poniendo el sentimiento que el campanero de turno hacía: difuntos, era un toque estremecedor. Un golpe seco y fuerte de las dos campanas mayores a la vez. Se conocía como clamor. Tres clamores si el difunto era varón. Dos clamores si se trataba de una mujer. Cuatro si era un clérigo. A continuación de los dos o tres clamores se producía un tin-tan con las dos campanas, comienzo lento, ritmo "in crescendo" hasta confundirse hasta confundirse ambas campanas, de nuevo descendiendo el ritmo y al final rematado con los clamores correspondientes.