LA MISMA QUE VISTE Y CALZA
En todo el pueblo tardajeño, actuando de la misma forma, en el colegio, en la coral, en el ayuntamiento, en el juzgado de paz... Menuda "huesa" he sido, hasta llegar a la "Fundación Para Fines Sociales de Doña Dominica Angulo", que a gala puedo tener el haberle cambiado el nombre con el consejo de Fernando el encargado del Registro de Fundaciones de la la Junta de Castilla y de León. Porque a mí, los buenos consejos los acojo cuando tienen fundamento.
Se equivocó la paloma si creyó por un momento que una se iba a callar lo fraudulento que aquí se ha cocido, ¡con el buen pan que tenemos!. Fui elegida para realizar un trabajito de blanqueo y puesta en orden de papeles, ¡y cómo estaban esos papeles! ¡Y cuánto oculto bajo las alfombras! ¿Y a santo de qué me iba yo a callar si escribir para mi es una gran alivio y placer? Ya le he dicho a mi sucesora que ella no se va a encontrar en los apuros que me he encontrado yo, ya que no escribe en los foros, que eso ha sido la gota que colmó el vaso en el 2011.
Sí, me dije, me echaréis sin pena ni gloria de donde queráis, pero a fe mía que de todo lo aprendido y de lo que habéis enseñado no os vais a librar. Lo siento, es que si fui corresponsal fue precisamente por ser así. Si fui juez fue por mi decisión de hacer justicia, que veo que en vano. Porque no tendremos justicia nunca si no somos justos en nuestras vidas ni en lo que administremos. Exigiremos a los demás, en vano, si no nos planteamos demostrar que somos merecedores de ella.
Nos quejaremos de lo mal que va el país pero sin reconocer la culpa de que así funcione de mal por nuestra culpa.
¿Engañé a alguien de mi idiosincrasia? Quizás pensaron de mi que era un adorno muy bonito ser corresponsal y nunca vieron cuánto me mojaba en ello, y cómo esa faceta salpicaba a mi y a los míos.
Que algunas personas, quizás, hayan sido jueces sin convicción pero que mi caso fue un deseo de ver cómo funcionaba la justicia desde el primer peldaño, y buenas conclusiones que he sacado.
Y aquello que tanto gustó de mi a esa paloma fue lo que más tarde aborreció también. La que manda, manda y los demás obedecen. Lástima que su poder no lo haya utilizado para solucionar los verdaderos problemas de los tardajeños y tardajeñas.
¡Cómo en el último pleno se quejaban algunos! ¿Por qué hay tantos papeles fuera del ayuntamiento?
Contestar a la pregunta en la intimidad. Pero no me culpéis a mi por ello, puesto que no ni he pinchado ni he cortado en todo este tiempo. Sólo he escrito un puñado de poemas, de textos, publicado fotos, ayudado a que todo hubiera ido mejor... En fin, que cada cual cargue con la culpa que le pertenezca.
LLegaré de nuevo tarde a misa, pero a tiempo, como siempre.
En todo el pueblo tardajeño, actuando de la misma forma, en el colegio, en la coral, en el ayuntamiento, en el juzgado de paz... Menuda "huesa" he sido, hasta llegar a la "Fundación Para Fines Sociales de Doña Dominica Angulo", que a gala puedo tener el haberle cambiado el nombre con el consejo de Fernando el encargado del Registro de Fundaciones de la la Junta de Castilla y de León. Porque a mí, los buenos consejos los acojo cuando tienen fundamento.
Se equivocó la paloma si creyó por un momento que una se iba a callar lo fraudulento que aquí se ha cocido, ¡con el buen pan que tenemos!. Fui elegida para realizar un trabajito de blanqueo y puesta en orden de papeles, ¡y cómo estaban esos papeles! ¡Y cuánto oculto bajo las alfombras! ¿Y a santo de qué me iba yo a callar si escribir para mi es una gran alivio y placer? Ya le he dicho a mi sucesora que ella no se va a encontrar en los apuros que me he encontrado yo, ya que no escribe en los foros, que eso ha sido la gota que colmó el vaso en el 2011.
Sí, me dije, me echaréis sin pena ni gloria de donde queráis, pero a fe mía que de todo lo aprendido y de lo que habéis enseñado no os vais a librar. Lo siento, es que si fui corresponsal fue precisamente por ser así. Si fui juez fue por mi decisión de hacer justicia, que veo que en vano. Porque no tendremos justicia nunca si no somos justos en nuestras vidas ni en lo que administremos. Exigiremos a los demás, en vano, si no nos planteamos demostrar que somos merecedores de ella.
Nos quejaremos de lo mal que va el país pero sin reconocer la culpa de que así funcione de mal por nuestra culpa.
¿Engañé a alguien de mi idiosincrasia? Quizás pensaron de mi que era un adorno muy bonito ser corresponsal y nunca vieron cuánto me mojaba en ello, y cómo esa faceta salpicaba a mi y a los míos.
Que algunas personas, quizás, hayan sido jueces sin convicción pero que mi caso fue un deseo de ver cómo funcionaba la justicia desde el primer peldaño, y buenas conclusiones que he sacado.
Y aquello que tanto gustó de mi a esa paloma fue lo que más tarde aborreció también. La que manda, manda y los demás obedecen. Lástima que su poder no lo haya utilizado para solucionar los verdaderos problemas de los tardajeños y tardajeñas.
¡Cómo en el último pleno se quejaban algunos! ¿Por qué hay tantos papeles fuera del ayuntamiento?
Contestar a la pregunta en la intimidad. Pero no me culpéis a mi por ello, puesto que no ni he pinchado ni he cortado en todo este tiempo. Sólo he escrito un puñado de poemas, de textos, publicado fotos, ayudado a que todo hubiera ido mejor... En fin, que cada cual cargue con la culpa que le pertenezca.
LLegaré de nuevo tarde a misa, pero a tiempo, como siempre.