Si resulta que ni unos frasquitos, que son gratis, no te pueden facilitar, no esperes que te resuelvan la vida, si tu no te la resuelves. Y así, me quedé con lo esencial, las teorías, los folletos, y las lecciones. Volviendo a lo aprendido mucho tiempo atrás, las buenas compañeras de infancia, las que me enseñaron, me ayudaron a crecer... ¡Qué tiempos aquellos! Aquí no es así, o eres tu, o nadie te va a ayudar, pues eso es lo vivido a lo largo del tiempo. Nada nuevo bajo el sol.
Yo también tengo mis propias recetas pues soy cultivadora de muchas plantas, voy a lo fácil, siempre que se puede, y sí podía haberme quedado a que me dieran el botecito de cacao para los labios, o la otra crema, pero es que lo tengo muy bueno. Más natural que aquello, cuyos efectos no había comprobado, y si algo te va bien, no lo cambias por aquello que puede ser mejor pero no lo conoces. Lo mío es amateur, proceso la información y luego me sirve en el día a día. Sin más productos añadidos.
Ya nos dijo Demetrio que la mejor cosmética empieza en la alimentación, la bebida y los buenos hábitos de todo tipo, etc... La agricultura ecológica está en alza. Pero a veces por mucho ecologismo que nos venden, es un fraude. Os lo digo yo. Que lo natural escasea y está al acecho de la industria química que todo lo malogra en su propio beneficio.
Pero sí, una tiene sus productos de huerta con antioxidantes a rebosar, y todas las vitaminas al completo. Lo que requiere mucho trabajo, paciencia y dedicación. Mis plantas, naturales cien por cien. Las aromáticas y las medicinales que uso a diario...
Y una crema no te va a hacer nada si por dentro no te cuidas. En fin que mis verduras me estaban esperando, y la torta, también, en la panadería. Que volví una segunda vez y las pociones no estaban listas, y cuando llegué la tercera vez, ya no había nada.
Demetrio ya lo avisó, en esta mesa la poción es muy escasa y no llegará a todas. Así que no hay como ir a lo seguro.
Nadie me va a explicar que lo natural es lo mejor cuando yo lo he experimentado mil veces en algo tan común como la sal. Curativa cien por cien, y algunos te dirán que si tal pócima, que si tan aceite esencial.... Lo importante es saber qué es lo que a ti te va bien, y no cambiarlo por más modas que vengan.
Y experimentar, y fracasar para después ir a dar con el buen camino. Quien busca halla y lo encuentra.
Yo también tengo mis propias recetas pues soy cultivadora de muchas plantas, voy a lo fácil, siempre que se puede, y sí podía haberme quedado a que me dieran el botecito de cacao para los labios, o la otra crema, pero es que lo tengo muy bueno. Más natural que aquello, cuyos efectos no había comprobado, y si algo te va bien, no lo cambias por aquello que puede ser mejor pero no lo conoces. Lo mío es amateur, proceso la información y luego me sirve en el día a día. Sin más productos añadidos.
Ya nos dijo Demetrio que la mejor cosmética empieza en la alimentación, la bebida y los buenos hábitos de todo tipo, etc... La agricultura ecológica está en alza. Pero a veces por mucho ecologismo que nos venden, es un fraude. Os lo digo yo. Que lo natural escasea y está al acecho de la industria química que todo lo malogra en su propio beneficio.
Pero sí, una tiene sus productos de huerta con antioxidantes a rebosar, y todas las vitaminas al completo. Lo que requiere mucho trabajo, paciencia y dedicación. Mis plantas, naturales cien por cien. Las aromáticas y las medicinales que uso a diario...
Y una crema no te va a hacer nada si por dentro no te cuidas. En fin que mis verduras me estaban esperando, y la torta, también, en la panadería. Que volví una segunda vez y las pociones no estaban listas, y cuando llegué la tercera vez, ya no había nada.
Demetrio ya lo avisó, en esta mesa la poción es muy escasa y no llegará a todas. Así que no hay como ir a lo seguro.
Nadie me va a explicar que lo natural es lo mejor cuando yo lo he experimentado mil veces en algo tan común como la sal. Curativa cien por cien, y algunos te dirán que si tal pócima, que si tan aceite esencial.... Lo importante es saber qué es lo que a ti te va bien, y no cambiarlo por más modas que vengan.
Y experimentar, y fracasar para después ir a dar con el buen camino. Quien busca halla y lo encuentra.