Pude fotografiar la polvoreda que dejaban los camiones en mis acostumbrados paseos, y ésta es una prueba de ello. Tras los camiones, venía otro vehículo que dispersaba el polvo refrescándolo con agua, quizás la nuestra propia. También debían pasar la cuchilla... Eso es ya historia tras el cambalache del ayuntamiento con estas empresas. Te hago esto, y dejo de hacer el grueso que hacía antes. Los negocios de nuestro regidor que sin contar con nadie hace y deshace, trata y acuerda sin que la gente tenga opción a decidir. Por lo que se ve planes cerrados que pasado el tiempo hay que examinar. Algún agricultor ya se ha quejado, que hay caminos muy destrozados. Pues nada, que como hay con qué ya se negociará algún que otro chanchullo. En un pleno se dijo que el entubamiento del camino de la chatarra era una contraprestación por esos daños a los caminos rurales, pero en el pleno, se resolvió de otra manera, una contraprestación por el robo del agua del hidrante que en febrero se detectó. Luego viva la transparencia que opacos son un rato.