A mi es que me maravillan estos políticos que se les pregunta y resulta que no saben nada.
Se dio el caso que comenté esa noticia en el facebook, también que le preguntaban sobre el fracking a Mardomingo y él dijo que no sabía de los daños que podía causar en el medio ambiente. Y teniendo tantos asesores, que les pase eso...
Luego, el día que me lo encontré en el Carrefour, que le hablé de la denuncia que había paralizado el alcalde de Tardajos, me dijo que no, que Tardajos no había denunciado. Yo ya le dije, prudentemente que sí, que había salido en la prensa, que cómo no lo podía saber...
Como llevan tantas cosas, estas insignificancias, para ellos, que no tienen que respirar en un pueblo el día a día, lo minimizan y ni lo tienen en cuenta. Viajes para aquí, para allá, y se les olvida de dónde son, dónde viven, dónde tienen casa, etc... Los ciudadanos no nos olvidamos porque nos toca bailar con la más fea siempre. A las duras, que las maduras rara vez nos tocan. Pagamos el pato de sus equívocos, de sus lagunas, de sus fallos y de sus desfalcos. Que encima se van de rositas, haciendo que les juzgan y sin pagar. Luego todavía quieren que hablemos bien de ellos. Así, como está el panorama que paga el que no se puede escapar que ellos la arman en firme y se van como si no hubieran roto un plato.
No es extraño que algunos vendan hasta su propio padre por cambiar de estatus, de ciudadano a político. Con decirle luego misas, están a camino.
Se dio el caso que comenté esa noticia en el facebook, también que le preguntaban sobre el fracking a Mardomingo y él dijo que no sabía de los daños que podía causar en el medio ambiente. Y teniendo tantos asesores, que les pase eso...
Luego, el día que me lo encontré en el Carrefour, que le hablé de la denuncia que había paralizado el alcalde de Tardajos, me dijo que no, que Tardajos no había denunciado. Yo ya le dije, prudentemente que sí, que había salido en la prensa, que cómo no lo podía saber...
Como llevan tantas cosas, estas insignificancias, para ellos, que no tienen que respirar en un pueblo el día a día, lo minimizan y ni lo tienen en cuenta. Viajes para aquí, para allá, y se les olvida de dónde son, dónde viven, dónde tienen casa, etc... Los ciudadanos no nos olvidamos porque nos toca bailar con la más fea siempre. A las duras, que las maduras rara vez nos tocan. Pagamos el pato de sus equívocos, de sus lagunas, de sus fallos y de sus desfalcos. Que encima se van de rositas, haciendo que les juzgan y sin pagar. Luego todavía quieren que hablemos bien de ellos. Así, como está el panorama que paga el que no se puede escapar que ellos la arman en firme y se van como si no hubieran roto un plato.
No es extraño que algunos vendan hasta su propio padre por cambiar de estatus, de ciudadano a político. Con decirle luego misas, están a camino.