TARDAJOS: ¡Hasta mentira me parece que en una plaza como la nuestra...

¡Hasta mentira me parece que en una plaza como la nuestra peligren los árboles! Que les ha costado muchos años estar así, y sin apenas cuidados. Cuando la fuente fue restaurada y es de piedra, y la verdad es que vuelve a mostrar debilidad. Y los árboles, sin cuidados, porque ellos mismos se buscan su propio sustento están en toda su plenitud. Los pinos, que aunque alguno muestra en sus ramas alguna procesionaria están dándoles batalla, y se sabe porque no muestran debilidad. El piñonero la combate. Fijaos en el pino del jardín de Neo que está decrépito, desde hace tiempo, y éstos de la plaza todavía tan sanos. Le plantan cara a ese gusano del mal.
¿No se podría hacer un vivero de pinos con los piñones de la plaza? A buen seguro iban a ser fuertes ya que en su origen están luchando con el mal. ¿Los abetos están enfermos? Están sanísimos ¿y el ciprés de Arizona? En su mejor momento. Pues hala, como les han concedido una ayuda a liquidar el medio natural. Con tres pares porque el que manda, hace lo que quiere.
¡Ay que plaza más bonita tiene Tardajos!, decía el linsojero y adulador del Chema, pero los cuartos le gustan más. Y la vara, ni te cuento.
Una plaza que presumía en el programa de la tele que es de las más grandes de la provincia, ¿y hay que talar los bellos ejemplares que tiene? A algunos de estos que mandan si les tuviéramos que calificar como árboles seguro que no daban la talla ni para ser un chopo. ¡Ay las choperas del monte! decía en otro artículo, ¿de monte o de playa? De ribera, las choperas que hay en Tardajos son de ribera, al lado del río, que han dado buenos dineros y todavía el gerifalte dice que muy poco dinero. Serrín en la cabeza sí tienen y lo demuestran día a día.
El día que vi la marquesina destruida y los plataneros talados es que no salía de mi asombro. Por más que me lo hubiera imaginado. No me lo pude imaginar y me impactó de lleno.
¿Y la calle Real? Ahora claramente se ve que está ladeada a la derecha, según vas a la carretera, porque es ahí donde se queda el agua. En la acera de la casa de la Cía se queda un gran charco. Menuda ingeniería que luce en Tardajos. Porque después de ver obras así, que ni siguiera después de tantos años les han renovado el alcantarillado... ¿La inclinación, ya que partían de cero no la han podido hacer equitativa y una vertiente en medio o rejillas para evacuar el agua? Eso lo he visto en otros sitios y no es ni medio normal que una calle que podría haber quedado perfecta no lo esté ni de nueva. Pavor me da pensar la escabechina que puedan hacer en la plaza, a imagen y semejanza de mentes planas, como se ve lo realizado hasta la fecha.
Contenedores arruinando un bonito parque y fuente, y porque les mola cantidad. Cuando a dos pasos hay contenedores cuando acaba el colegio, y en las eras también. Es un decorado adicional que va muy bien a un parque y a un albergue de peregrinos. Cuando llueve hay unos charcos y un barrizal majo.
La brecha oxidada de la entrada al municipio con una ferralla que cuesta un ojo de la cara. O sea, que una vez que aplanan el terreno quitándole su inclinación después se inventan un inclinación artificial que a la empresa le renta. Primero le ha rentado el nivelar el terreno y luego para que no quede soso, unos hierros majísimos. Un vecino me dijo que a lo mejor los iban a pintar. Sí ahí se podrían poner sus retratos.
Los jardines de chinitas y la casetilla de chichinabo que transparente es lo verdaderamente transparente del municipio. Tanto que da lo mismo que esté o que no. Si hay mucha gente, imposible que se puedan meter, y menos si no se hablan. Y de eso hay mucho ya. Y si llueve y el agua viene de frente te calas. Si nieva, quedas como un copito de nieve... O si los vientos azotan, te bambolean como a una caña.
Los preciosísimos bolardos de la carretera. En fin, que mucho gusto se ven que no tienen. Por eso ya lo de la plaza es que me quita el sueño. Ya seguiré con las fotos de la Fiesta de la patata, que artículo escrito ya tengo en facebook.