TARDAJOS: He llegado justo a tiempo, he saludado, y claro como...

He llegado justo a tiempo, he saludado, y claro como estaban tan entretenidos y con tantas ganas de acabar, nadie ha dicho nada.
Se ha aprobado el pleno anterior, y como una centella el pleno presente se ha levantado. Los presentes de C's más el voto de Félix ha sido a favor; Julián, el voto en contra.
Le han preguntado al señor alcalde qué se iba a hacer con el tema de los árboles, y él ya no quería saber nada en el salón de actos. Ya se hará, dijo.
Como este acto ha sido meteórico, y os he anunciado que él, el alcalde, en misa dijo otro de sus discursitos, ya de despedida... Que por cierto, es que yo desde el Coro no lo oí apenas. Mejor. Cuando salimos en procesión me lo fueron contando por el camino. ¡Qué compungido estaba, cuántos besos y abrazos nos daría a cada uno de nosotros...! Que nos pedía perdón por sus equivocaciones, etc... Es que la verdad no lo puedo ni entender. ¿No nos ha tenido día a día en los plenos, en las calles, en los bares...? Pidiendo la palabra que sistemáticamente se nos negaba? Porque lo primero nos puso muy mala cara y malas palabras en privado. Eso fue el detonante. ¿Ah, sí, con que esos humos tenemos cuando nos creemos arrobados de poder? Pues nada, en público y a correr. ¡Ah, no, en público, en el pleno, tampoco.! Pues nada, en el foro y a dar audiencia a todo aquel que tenga a bien abrirlo y leer lo que se dice. El lugar por excelencia de hablar con los ciudadanos es el pleno, el ayuntamiento, la calle, y donde quiera que haya vecinos.
Era en la iglesia, y en la festividad de la Virgen de las Aguas cuando él tenía que dar su discurso, corto, sí pero fuera de lugar. Y falso, porque a mi me decían, no se puede creer nada de lo que dice.
Bajo mi punto de vista, ¿por qué no leyó la palabra de Dios y no la suya propia? Debe ser más importante o por lo menos así se debe considerar.
Que lo sepa su señoría, que hubo gente a la que el estómago se le revolvió y a punto estuvieron de irse de la iglesia. Es que hay cosas y cosas. Si no sientes lo que dices, no lo digas de forma oportunista.