Eremitorio de
San Pedro en Tartalés, es un pequeña
ermita rupestre a modo de
cueva, excavada por el hombre allá por los siglos VII-VIII, que hacía las funciones de una pequeña
iglesia. Se encuentra ubicada en el corazón del
parque natural
Montes Obarenes -San Zadornil, en el desfiladero de la Horadada.