Sus habitantes celebran su fe en una
iglesia dedicada a La Asunción de Nuestra Señora, renacentista, de una nave con una
capilla, con pilastrones y
arcos de
piedra,
cúpula tipo venera, sobre pechinas aveneradas, con pintura barroca. Su
ábside es rectangular, de sillería, con fuertes pilastrones en
esquinas y
alero moldurado, como toda la iglesia, más elevado que la nave y rematado en pequeña linterna octogonal con arcos de medio punto. Y la
torre es una
espadaña de dos cuerpos, con remate de bolas,
frontón y
cruz, con tres huecos y dos
campanas.
La
pila es de copa, lisa, con pie cilíndrico y base circular; y el
retablo mayor, bueno, aunque repintado, es clasicista, con imágenes y relieves. En otro, barroco, hay un Crucificado
gótico, del siglo XIV. Y en otro, también barroco, una
Virgen del Rosario con Niño, del siglo XVI.
Hay también un
escudo.
Sus libros parroquiales comienzan en el año 1566.
María Pilar Merlos y Alberto Díez de
Tubilleja han escrito un libro sobre el
pueblo.
Y están catalogados en sus tierras un yacimiento arqueológico
Medieval y otro de época sin determinar; más dos posiblemente
Romanos (una estela) y tres posiblemente
Medievales