Tiene su
iglesia un tanto apartada del
pueblo, dedicada a
San Miguel Arcángel. Es
románica en el cuerpo con
columnas,
capiteles,
arcos y
esquinas con
cúpula y
bóvedas de cañón, del tercer cuarto del siglo XII, y
capillas en
cruz con bóvedas estrelladas de siglo XV. Su
ábside es rectangular con contrafuertes. La
portada es románica, con fustes, capiteles, sogueados y ajedrezados en arquivoltas y canes historiados, bajo
pórtico con cuatro arcadas clásicas y
ventana románica.
La
torre es también románica, cuadrada, con ocho
ventanales gemelos con capiteles y canes en
alero, con dos
campanas y una pequeña
espadaña con un hueco y sin campanas. En husillo de subida hay una figura humana y una bestia, románicas del siglo XII.
La
pila es románica, lisa, con pie cilíndrico moldurado y base circular; y el
retablo mayor es barroco. Tiene otros dos buenos
retablos clasicistas
y en otro, barroco de
hornacina, hay una
Virgen sedente con Niño del siglo XIV. Tiene
púlpito de
piedra. Buen conjunto de iglesia.
Sus libros parroquiales comienzan en el año 1564.
Hubo un antiguo eremitorio, dedicado a San Martín, que entró en las donaciones para la fundación del
monasterios de Oña.
Hay una hermosa torre almenada, cuadrada, de 20 metros, con el
escudo de los Velasco, de principios de siglo XIV.
El 4 de diciembre de 1757 nace Francisco de la Garza, el primer ingeniero de
minas de la nación, director en Almadén, muy experto en su ramo. Escritor.
En 1943 comienza sus días en el cuartel de la guardia civil, José Antonio
Río del Val, emigrado a Buenos Aires, sociólogo, periodista, escritor.
Hay junto al río Ebro un gran
edificio, que fue
fábrica de harinas. Más tarde comenzó allí la fábrica de seda artificial hasta que se trasladó a
Burgos en 1929, (SESA), y más tarde fue prisión en tiempos de la guerra civil.
Y están catalogados en su término un yacimiento arqueológico
medieval (necrópolis de san Martín) y otros dos de época indeterminada.