NECRÓPOLIS DE
SAN FÉLIX
La necrópolis de San Félix o San
Felices se encuentra bajo el espeso y cálido bosque de robles de la dehesa de la localidad de
Villabáscones de Sotocueva, formando parte del
Monumento Natural de Ojo Guareña, ya que está dentro del espacio protegido.
Este conjunto podría datarse entre los siglos X y XII, probablemente, para aquellos primeros cristianos de los que se dice fundaron Castilla.
Está formada por más de 25 tumbas antropomorfas excavadas en la
roca, la mayor parte de ellas de un tamaño adulto y solo un par de ellas de un tamaño infantil. Todas ellas presentan claramente marcado el hueco de la cabeza y un ensanche para los hombros, a partir del cual se va estrechando. Están orientadas este (pies) oeste (cabeza). También se puede observar alguna de las losas monolíticas que cubrían los sepulcros.
El hecho de que los nichos estén vacíos, sin lápidas, a veces llenos de hojas de robles y otras de
agua, le dan un toque más prosaico que rompe en parte el encanto del lugar.