Villamayor de Treviño es una pequeña localidad y un municipio, cabecera del
ayuntamiento de su nombre, situados al noroeste de la provincia de
Burgos, junto al
río Odra, en la comarca de Odra-Pisuerga.
Antes de tener datos escritos, los
romanos ya habían dejado su huella en el término municipal de Villamayor de Treviño.
Las primeras noticias del
pueblo son de 1092 pues Nuño Ansúrez dona sus bienes de Villamayor de Treviño a la
Catedral de Burgos.
Villamayor tiene forma alargada pues ha ido creciendo en torno a la
Calle Real y a la
carretera Villadiego–Melgar de Fernamental, sus
calles tienen la estructura típica de los
pueblos castellanos burgaleses, y en el centro se sitúa la
iglesia.
La iglesia de la Natividad de Nuestra Señora de Villamayor de Treviño es un complejo
edificio de varias etapas constructivas, que abarcan desde el siglo XII al XVIII. Se trata de un templo de tres naves, con
ábside románico de semitambor obra de finales del siglo XII, con una bella
portada y
torre campanario, donde destaca un hermoso
retablo en la nave mayor.
Esta iglesia es una de las tres que hubo en otros tiempos. Las otras dos
iglesias se llamaban iglesia de
San Miguel, que se encontraba en el
convento premostratense de San Miguel, y la Iglesia de San Esteban, que estaba en el
barrio del mismo nombre.
Villamayor de Treviño es conocido también por el
monasterio premonstratense de San Miguel que fue entregado en 1166 al abad de La Vid por Nuño García y Gonzalo Pérez de Padilla. Del viejo edificio que duró hasta la desamortización de 1836, hoy sólo queda la portada del compás, una pequeña
espadaña y la cerca.
Por sus alrededores se pueden dar
paseos muy agradables, en especial por la ribera del río Odra donde hay varias zonas arboladas. De ahí que el turismo rural sea uno de los principales recursos económicos para los lugareños.