Hay que ascender una amplia, larga y sinuosa escalinata para llegar a su
iglesia, situada en lo más alto y dedicada a
Santo
Tomás de Aquino. Es de una nave rectangular con contrafuertes a lo largo de ella, lo mismo que las
esquinas del
ábside que es también rectangular, al que se le han añadido algunas dependencias. La
portada tiene
arco de medio punto, sencilla, bajo amplio
pórtico medio abierto. Tiene otra portada a los pies, también de medio punto con grandes dovelas e impostas, en desuso.
Y tiene una amplia
torre cuadrada, de cuatro cuerpos en decreciente, cuatro huecos y dos
campanas. Una
placa habla de 1859.
En sus tierras está catalogado un yacimiento arqueológico de época sin determinar.