Este
pueblo del alto
Brullés cuenta con una
iglesia románica de dos
ábsides —caso singular en el
románico burgalés— y una fortificación de principios del siglo XV, el
torreón de los Varona, con tres plantas y 20 metros de altura coronados con tres filas de ménsulas.
La iglesia románica de
San Martín de esta localidad ribereña del Brullés y cercana a
Villadiego cuenta con dos naves y sus respectivos ábsides semicirculares de parecida factura, una singularidad dentro del románico burgalés.
Toda la
fábrica del templo es de buena sillería caliza y sus dos naves fueron edificadas en dos momentos distintos, aunque casi sucesivos. La septentrional es de finales del s. XII —según una inscripción grabada en el muro—y la meridional de comienzos de la siguiente centuria.
El
ábside septentrional presenta tres paños separados por dos
columnas entregas con
capiteles decorados con vegetales y cabezas humanas. El
alero luce una cornisa ajedrezada sostenida con
canecillos figurados entre los que destaca el central: un encapuchado exhibicionista.
En el lienzo central de la cabecera se abre una bella
ventana con dos arquivoltas decoradas con diversos motivos geométricos: dientes de
sierra, sogueados y tacos de billetes.
También están decorados los dos capiteles de la ventana. Mientras el de la derecha presenta dos aves enfrentadas con sus cuellos entrelazados; el de la izquierda, muestra una sirena que garra con las manos su doble cola. Los cimacios lucen sinuosos tallos con triples hojas.
Una sencilla
portada de medio punto, desplazada cuando se construyó la nave meridional, permite el acceso a un interior en el que llaman la atención los dos amplios
arcos formeros apuntados que separan las dos naves cubiertas con
bóvedas apuntadas.
Desde
Burgos se llega por la A-231 hasta Villanueva de Argaño. Desde allí por la BU-627, pasando por Villadiego, y enlazando con la CL-633 enseguida se alcanza
Villaute.