Después de un cierto tiempo muy atareado, aquí estoy de nuevo, como ave fénix,
para seguir recordando los más bellos momentos de nuestra existencia, en el
bucólico y bonito
pueblo donde nací:
Villavedeo.
Seguiré, mientras pueda, compartiendo vivencias y recuerdos con todos los que,
como tú Jacaranda, tengan la paciencia de leer mis modestas impresiones. Puedes estar segura que salen, con todo el sentimiento más profundo de mi corazón.