Tiene su
iglesia dedicada a
san Juan Bautista y es renacentista, de una nave con
capillas en
cruz latina formando un ochavo en el crucero, con pilastrones y
arcos de
piedra y
bóvedas de yeso. Su
ábside es rectangular. La
portada, a los pies, tiene
arco de medio punto con grandes dovelas almohadilladas y breves impostas y otra renacentista tapiada. Y la
torre es cuadrada, esbelta por una estancia edificada sobre el
campanario, rematada en bolas,
alero moldurado y pequeña
espadaña, con seis huecos, dos
campanas y dos campanillos.
La
pila es de copa lisa con pie cilíndrico; y el
retablo mayor es barroco-rococó de Andrés Bolado en 1765, con una Asunción del siglo XVI.
En otro neoclásico hay un Crucificado del siglo XVI. Hay una
Virgen sedente del siglo XIV.
Tiene un
púlpito de piedra policromada y tornavoz.
Hay una nota en su libro de matrícula: 1757-1854, folio 110 vuelto, que dice que “el 1 de diciembre en 1862 fueron quemados todos los
altares y demás combustibles de la iglesia y sacristía”, algo, al parecer no real.
Y están catalogados en sus límites un yacimiento arqueológico del Neolítico y Pleno
medieval con posibles restos del Calcolítico y Bajomedieval; otro de época sin determinar; y, además, otro posiblemente Tardorromano y Medieval