La casa fué, antes de este último arreglo, fragua del pueblo donde el herrero arreglaba las herramientas y maquinaria agrícolas; donde caldeaba con el fogón los metales para forjarlos, avivando el fuego mediante una corriente horizontal de aire producida por un fuelle.
Anteriormente, el taller de la fragua estuvo instalado en otro lugar junto al antiguo "potro", aquel armazón de madera que sevía para sujetar a los vacas cuando se resisten a dejarse herrar o curar.

(Septiembre de 2013)