¡Hola, a todos!
Como indiqué al comentar una
foto de "A orilla del Esla", cuelgo hoy esta estampa y un trabajillo que la misma me inspiró, en el cual se refleja una de las escenas habituales en el
pueblín cuando había pandillas de mozos:
La pandilla va de cena
En la
cueva de Luis hay cena:
vino, guiso y charla amena.
Con la mente despejada,
sin ninguna condición,
los pandilleros acuden
del condumio a dar la cuenta
en placentera sesión.
Sobre el pozal de la cueva,
el entremiso por tabla,
posan el jarro y los vasos,
de
pan de trigo la hogaza,
dos curros de Rosalía,
ayer por el
río muy ufanos
y hoy con esmero guisados
por una cómplice abuela,
y los útiles precisos
para asaltar la cazuela.
A la redonda sentados
sobre unos fuertes marranos
los comensales dan cuenta
de manjar tan suculento
con mucho humor y contento.
Entre tiento y tiento al vaso
se prolonga la tertulia
y, ya tomada la espuela,
todos van saliendo al raso;
soportando la pelona,
ya cayendo sin mesura,
completamente agarbados
a las mozas dan la ronda
bajo la luz de la luna:
-" ¡Hurí, hurí, hurí,
los de la panda, los de la panda!
¡Hurí, hurí, hurí,
los de la panda estamos aquí!
Unos beben vino, otros aguardiente
y los más borrachos..."
Con especial dedicación para los que aún se reunen en alguna cueva y disfrutan de momentos tan reconfortantes. ¡Que no decaiga!
Un cordial saludo para todos.
Un paisano de Sabino Ordás.