Esta estampa, tan propia del mes de mayo, trae a mi mente uno de aquellos dichos que tanto repetíamos de pequeños: -"Marzo, nidarzo; abril, güeveril; mayo, pajarayo; por
San Juan, pajaritos a volar".
De este pájaro, siempre encontrábamos
nidos los chavales en las bardas de las entradas de las
cuevas y de las paredes de los
huertos, concretamente en la barda de la entrada al
huerto del "tío Emeterio", hoy desaparecida, y en la de la tapia trasera del huerto de Raimunda, también desaparecida, anidaban todos los años.
La
foto corresponde a un
nido de pardillo, descubierto por casualidad en una viña cercana al "Huerto Lechero", al otro extremo del
pueblo, cuando íbamos arándola.
Un cordial saludo para todos.
Un paisano de Sabino Ordás.