Cada año las golondrinas atraviesan la
mar y vuelven para volverse a casar, reproducirse y nuevamente marchar.
Las circunstancias concurrentes en cada uno de los integrantes del paisanaje que vio la luz en
Ardón han ido mostrando a cada cual el
camino a recorrer durante el transcurso de su vida, siendo "no pocos" aquéllos que, al igual que las golondrinas, hemos tenido que adaptarnos a otras latitudes.
Me consta, y me congratula que puedan hacerlo, que muchos de ellos cumplen el empeño de asistir cada año a la celebración de nuestra
fiesta mayor: "El
Corpus".
Les deseo que disfruten a su gusto en dicho día y con un poco de envidia, este año no puedo acompañarles, les dedico la instantánea que hoy cuelgo: ¡
Feliz Fiesta!
Un paisano de Sabino Ordás.