¡Hola, a orilla del Esla!
Te agradezco las aclaraciones que me haces y, como tu muy bien sugieres, el nominar "Valle Hondo" al"Valle de la Pradera" es un error cartográfico. Personalmente he detectado otros errores, como el prolongar el "Camino del Soto", el que transcurre al lado de la cuesta del río, hasta el final de "El Castro", hasta el auténtico "Valle Hondo", cuando dicho camino solamente llegaba hasta el "Valle de la Pradera", a través del cual enlazaba con los senderos de bajada a la pradera que había en "El Soto Abajo", donde pastaban las veceras de Ardón, la del "ganau" vacuno y la de las burras.
¡Ay, el Soto Abajo! En los charcos que allí había, y que cada año remozaban con las crecidas del río, cogí en varias ocasiones auténticas cangrejadas, de fardel lleno, tanto a mano, como con "rateles"; en Ardón decimos rateles, ¿o no?
Un cordial saludo.
Un paisano de Sabino Ordás
Te agradezco las aclaraciones que me haces y, como tu muy bien sugieres, el nominar "Valle Hondo" al"Valle de la Pradera" es un error cartográfico. Personalmente he detectado otros errores, como el prolongar el "Camino del Soto", el que transcurre al lado de la cuesta del río, hasta el final de "El Castro", hasta el auténtico "Valle Hondo", cuando dicho camino solamente llegaba hasta el "Valle de la Pradera", a través del cual enlazaba con los senderos de bajada a la pradera que había en "El Soto Abajo", donde pastaban las veceras de Ardón, la del "ganau" vacuno y la de las burras.
¡Ay, el Soto Abajo! En los charcos que allí había, y que cada año remozaban con las crecidas del río, cogí en varias ocasiones auténticas cangrejadas, de fardel lleno, tanto a mano, como con "rateles"; en Ardón decimos rateles, ¿o no?
Un cordial saludo.
Un paisano de Sabino Ordás
¡Hola, paisano de sabino ordas!
Yo también recuerdo los Senderos y el Soto, en los charcos ver las carpas, las tencas, los curros y unos pájaros haciendo los nidos en los “rebadillos” de los charcos, en las cuestas los conejos y las tórtolas y demás naturaleza, también algún manantial donde se enfriaba alguna bebida en verano y muchos mosquitos.
Gracias por la foto panorámica desde la columna.
Un cordial saludo.
A orilla del Esla.
Yo también recuerdo los Senderos y el Soto, en los charcos ver las carpas, las tencas, los curros y unos pájaros haciendo los nidos en los “rebadillos” de los charcos, en las cuestas los conejos y las tórtolas y demás naturaleza, también algún manantial donde se enfriaba alguna bebida en verano y muchos mosquitos.
Gracias por la foto panorámica desde la columna.
Un cordial saludo.
A orilla del Esla.
¡Hola, a orillas del Esla!
Los pájaros que hacían los nidos en los "rebadillos" de los charcos del Soto Abajo eran "aviones", muy parecidos a la golondrina, pero con las plumas del rabo y de las alas más cortas y con un mechón de plumas blancas en la parte superior trasera del tronco.
Al otro lado de los rebadillos y de los charcos, en los cascajales, anidaban los alcaravanes. Recuerdo varias ocasiones en que Obdulio y Luis, chavales que cuidaban la vecera con su padre, encontraron nidos y cogieron las crías de estos pájaros.
En los propios charcos, aparte de las especies que tú reseñas, recuerdo que había marmajuelas, gobernantas, escallos, ranas, cangrejos, bogas, barbos, renacuajos..., pues yo los pescaba; otro día hablaremos de otros habitantes del biocharco soteño. Por cierto que también teníamos otro soto con pozos artificiales secos y derruídos, en cuyos fondos había otras especies de animales, me refiero al Soto Arriba.
Continuando con los charcos del Soto Abajo, en ellos vi muchas veces a la cigüeña, a la garza real, a la grulla, a la pecera, una especie pequeña de gaviota, del tamañode una paloma más o menos y completamente blanca, que también cogía peces en las tablas del río, yo la vi hacerlo en las de El Jardín, El Gallo y La Escala, lanzándose en picado a chapuzón sobre su presa, con resultado positivo la mayor parte de las veces.
Un cordial saludo.
Los pájaros que hacían los nidos en los "rebadillos" de los charcos del Soto Abajo eran "aviones", muy parecidos a la golondrina, pero con las plumas del rabo y de las alas más cortas y con un mechón de plumas blancas en la parte superior trasera del tronco.
Al otro lado de los rebadillos y de los charcos, en los cascajales, anidaban los alcaravanes. Recuerdo varias ocasiones en que Obdulio y Luis, chavales que cuidaban la vecera con su padre, encontraron nidos y cogieron las crías de estos pájaros.
En los propios charcos, aparte de las especies que tú reseñas, recuerdo que había marmajuelas, gobernantas, escallos, ranas, cangrejos, bogas, barbos, renacuajos..., pues yo los pescaba; otro día hablaremos de otros habitantes del biocharco soteño. Por cierto que también teníamos otro soto con pozos artificiales secos y derruídos, en cuyos fondos había otras especies de animales, me refiero al Soto Arriba.
Continuando con los charcos del Soto Abajo, en ellos vi muchas veces a la cigüeña, a la garza real, a la grulla, a la pecera, una especie pequeña de gaviota, del tamañode una paloma más o menos y completamente blanca, que también cogía peces en las tablas del río, yo la vi hacerlo en las de El Jardín, El Gallo y La Escala, lanzándose en picado a chapuzón sobre su presa, con resultado positivo la mayor parte de las veces.
Un cordial saludo.
¡Hola, paisano de sabino ordas!
Gracias por aclararme lo de los aviones y ampliar los nombres de los habitantes acuáticos, terrestres y aéreos de este paraje. Ahora me viene el nombre de otro pájaro, el azulejo, no se si ese es el nombre, que también anidaba en el rebadillo.
Me sorprendieron los nombres de los hijos de Amador y Ascensión, José Luis y Obdulio y que tenían otros hermanos, Vitalina, Tomas, Guiomar, Marucha, Milagros, Orosia y Gelines. (Tuve que consultar la “ENCICLOPEDIA” para aclarar nombres, padres, hijos y calles donde muchos vivieron, de estos y otros nombres que mencionas aquí y en otros mensajes.)
Espero poner después del verano alguna foto del Soto Arriba.
Un cordial saludo.
Gracias por aclararme lo de los aviones y ampliar los nombres de los habitantes acuáticos, terrestres y aéreos de este paraje. Ahora me viene el nombre de otro pájaro, el azulejo, no se si ese es el nombre, que también anidaba en el rebadillo.
Me sorprendieron los nombres de los hijos de Amador y Ascensión, José Luis y Obdulio y que tenían otros hermanos, Vitalina, Tomas, Guiomar, Marucha, Milagros, Orosia y Gelines. (Tuve que consultar la “ENCICLOPEDIA” para aclarar nombres, padres, hijos y calles donde muchos vivieron, de estos y otros nombres que mencionas aquí y en otros mensajes.)
Espero poner después del verano alguna foto del Soto Arriba.
Un cordial saludo.
¡Hola, "A orilla del Esla"!
El pájaro al que te refieres, como posible "azulejo", es el "martín pescador", un ejemplar bastante común en la avifauna local. Este es azul, varios matices, por la parte superior, anida en los agujeros de los rebadillos del río o del reguero, hace dos puestas al año, y es un consumado pescador que monta su observatorio en una rama de palera sobre el agua, por ejemplo, y desde allí se lanza en picado sobre la presa en cuanto la descubre. La última vez que disfruté de esta faena fue hace dos años en "El Jardín". Existen efectivamente varios pájaros que se llaman "azulejo", pero éstos viven en hábitats de clima tropical.
Otro animalito, del que no nos hemos acordado y que vive en los cascajales del río, es el "saltamontes"; y en las piedras de la rasera o de la orilla del río, cubiertas de agua, el "gusarapín", uno de los mejores cebos naturales para la pesca de truchas, barbos... Tuve la fortuna de presenciar la eclosión metamorfósica de esta larva en varias ocasiones.
Veo que das fe de toda la familia "Madruga" (Ascensión). Creo recordar que tenía dos hermanos: ¿Andrés? y Joaquín; el primero tenia varios hijos y vivía en la calle La Quintana, en la casa que hoy es de Santiago, frente a la de Ambrosio, y el segundo emparentó con la familia de Segundo.
Por otro lado, ahora te amplio algo sobre el otro mensaje, el de la casa multiusos, Cesáreo también era practicante, hay dos anécdotas al respecto que quizá algún día reseñe, y Mauricio ejerció en Villalobar.
Un cordialsaludo.
El pájaro al que te refieres, como posible "azulejo", es el "martín pescador", un ejemplar bastante común en la avifauna local. Este es azul, varios matices, por la parte superior, anida en los agujeros de los rebadillos del río o del reguero, hace dos puestas al año, y es un consumado pescador que monta su observatorio en una rama de palera sobre el agua, por ejemplo, y desde allí se lanza en picado sobre la presa en cuanto la descubre. La última vez que disfruté de esta faena fue hace dos años en "El Jardín". Existen efectivamente varios pájaros que se llaman "azulejo", pero éstos viven en hábitats de clima tropical.
Otro animalito, del que no nos hemos acordado y que vive en los cascajales del río, es el "saltamontes"; y en las piedras de la rasera o de la orilla del río, cubiertas de agua, el "gusarapín", uno de los mejores cebos naturales para la pesca de truchas, barbos... Tuve la fortuna de presenciar la eclosión metamorfósica de esta larva en varias ocasiones.
Veo que das fe de toda la familia "Madruga" (Ascensión). Creo recordar que tenía dos hermanos: ¿Andrés? y Joaquín; el primero tenia varios hijos y vivía en la calle La Quintana, en la casa que hoy es de Santiago, frente a la de Ambrosio, y el segundo emparentó con la familia de Segundo.
Por otro lado, ahora te amplio algo sobre el otro mensaje, el de la casa multiusos, Cesáreo también era practicante, hay dos anécdotas al respecto que quizá algún día reseñe, y Mauricio ejerció en Villalobar.
Un cordialsaludo.