Factura rebajada un 25%
Un vecino de León fabrica en Armellada un crecepelo «mágico» y asegura que con su producto se consiguen resultados milagrosos en un tiempo récord.
miguel ángel zamora | león 21/10/2013
Leonardo Jimeno muestra los resultados de su producto. Leonardo Jimeno muestra los resultados de su producto.
RAMIRO
Leonardo Jimeno se dedicaba a la construcción. Ya es pasado. «Esto lo veo tan factible que lo he dejado todo. Tuve hasta tres empresas. Pero un día probé el producto y ví que empezaba a salir pelo y lo tuve claro». Año y medio experimentando le sirvió para saber que Crecepelo Leonardo va a ser el producto que a él le dé de comer y a otros muchos les evite beber. Para olvidar. «He regalado ya más de 2.000 botes. 1.000 han ido a la basura, fijo. La gente, cuando lo regalas, tiene miedo. Yo entiendo que genere desconfianza, es normal. Pero este sí funciona. Me da más resultado venderlo que regalárselo a los amigos, pero con un poco de perseverancia, la cosa va a salir adelante».
La fórmula viene de fuera de España. «Hice cinco o seis pruebas y enseguida vi que había acertado. En cinco o seis días, ya puedes tirar fuerte del pelo que no se cae. Y a los que no tienen, a los once días ya les aparece la primera pelusa». Tuvo que hacer una inversión fuerte que no quiere confesar: «De momento no he recuperado nada, pero lo haré». Cuenta con todos los permisos de producción en regla y con la licencia sanitaria. «Y ya tengo el testimonio de cien o doscientas personas que les ha funcionado. Yo ahora mismo podría hacer ya 800 botes diarios. Y sé que esto no es un cuento. Me he dedicado a las placas solares, urbanicé parte de La Lastra, trabajé en la construcción haciendo viviendas.. Pero sé que esto me va a solucionar la vida»
Según su inventor, el producto elimina la caspa, las costras y las sequedades en nueve días. En once días seguidos de tratamiento empieza a fortalecer el pelo en pacientes que sufren su caída. Recuperar el pelo perdido exige varios tratamientos de once días según resultados y cabezas y también sirve como fijador. «No hay más que taparse la cabeza con una toalla para no manchar la almohada. Lo ideal es aplicarlo un par de horas antes de acostarse».
Funcionamiento sencillo
El funcionamiento del elixir es sencillo: «Esto es una crema que antes de acostarte te la aplicas en todo el cuero cabelludo, con los dedos, jeringuilla o spray. Masajeas con las manos. Queda como gomina fuerte. A la mañana siguiente, cuando te levantas te duchas si quieres o lo dejas como gomina y haces vida normal». Los tratamientos duran de nueve a once días seguidos «para ver resultados eficaces buenos». Hace falta un par de meses para ver resultados ya tangibles, pero el tratamiento completo es de año y medio o dos años. A todo el mundo le sale pelo, más tarde o más pronto, pero le sale».
Busca distribuidores
Está buscando distribuidores para llevar el producto a «farmacias, peluquerías, parafarmacias y herboristerías». Está hecho a base de huevo, aceites, alcohol y agua. «A la gente que tiene stress o que le viene el problema de herencia, les funciona también. Hay chicas jóvenes a las que les falta pelo y tienen luego unas capas tremendas. También combate la caída, la caspa...».
La distribución de momento se hará por vía directa, a través del teléfono (630) 16 78 60 o a través de Crecepeloleonardo. blogspot. com que es su página web. «Quiero sacar otros modelos de presentación y estoy pendiente de que me lleguen las cajas. Ya tengo hecho el registro de la patente a nivel mundial. La saqué a los quince días de lanzar el producto porque vi que era el futuro». Y ahora ya hace planes: «Sé seguro que voy a tener que montar una fábrica y comprar maquinaria. Vivo en Montejos del Camino pero produzco en Armellada. Si no alcanzo cerca de cien distribuidores este año, no voy a tener ninguno. Tengo muchos ejemplos que me confirman que esto funciona».
Poco tiempo
Coronas, entradas, escasez y caídas de pelo son los problemas más frecuentes. «Hay quien pasa de probar nada, porque se ven ya como imposibles, creen que son causas perdidas. Al principio no te creían. Ahora me funciona más cuando lo vendo que cuando lo regalo». El frasco cuesta 48,40 euros. Una persona normal necesita seis botes al año como mínimo. Para controlar la caída o poner el pelo fuerte «con dos botes al año sobre». En dos o tres años, el problema está resuelto».
Analiza los productos de la competencia de pasada. «No los he mirado mucho, solamente sé que no funcionan y este sí. Los hay que tienen productos incluso perjudiciales. «Los americanos fueron los primeros que lo investigaron».
Tiene claro cuál es el problema de los productos de la competencia. «Casi todos producen efectos secundarios y hay gente metiéndose cada cosa que espanta. Yo no, yo sé que lo mío funciona seguro y que no tiene ninguna contraindicación. Ahora de momento estoy volcado en la tarea de darlo a conocer y en los medios de comunicación. Pero no tardando me tendré que plantear montar una fábrica a nivel más serio, porque la producción va a ser muy importante».
Cuenta con la preceptiva autorización de actividades de instalación de cosméticos desde septiembre del año pasado y fija la base de su laboratorio en León. Y ya tiene, sobre todo, deformación profesional. Analiza detalladamente toda cabellera andante que le pasa por delante para prescribir el tratamiento más idóneo a cada caso. Está claro, de tonto no tiene un pelo. Ni tampoco los tiene en la lengua por la manera en la que se explica. «Yo sé que habrá mucha gente que piense que este es un producto más. Cuando empiecen a ver cómo funciona, ya veremos qué opinan».
miguel ángel zamora | león 21/10/2013
Leonardo Jimeno muestra los resultados de su producto. Leonardo Jimeno muestra los resultados de su producto.
RAMIRO
Leonardo Jimeno se dedicaba a la construcción. Ya es pasado. «Esto lo veo tan factible que lo he dejado todo. Tuve hasta tres empresas. Pero un día probé el producto y ví que empezaba a salir pelo y lo tuve claro». Año y medio experimentando le sirvió para saber que Crecepelo Leonardo va a ser el producto que a él le dé de comer y a otros muchos les evite beber. Para olvidar. «He regalado ya más de 2.000 botes. 1.000 han ido a la basura, fijo. La gente, cuando lo regalas, tiene miedo. Yo entiendo que genere desconfianza, es normal. Pero este sí funciona. Me da más resultado venderlo que regalárselo a los amigos, pero con un poco de perseverancia, la cosa va a salir adelante».
La fórmula viene de fuera de España. «Hice cinco o seis pruebas y enseguida vi que había acertado. En cinco o seis días, ya puedes tirar fuerte del pelo que no se cae. Y a los que no tienen, a los once días ya les aparece la primera pelusa». Tuvo que hacer una inversión fuerte que no quiere confesar: «De momento no he recuperado nada, pero lo haré». Cuenta con todos los permisos de producción en regla y con la licencia sanitaria. «Y ya tengo el testimonio de cien o doscientas personas que les ha funcionado. Yo ahora mismo podría hacer ya 800 botes diarios. Y sé que esto no es un cuento. Me he dedicado a las placas solares, urbanicé parte de La Lastra, trabajé en la construcción haciendo viviendas.. Pero sé que esto me va a solucionar la vida»
Según su inventor, el producto elimina la caspa, las costras y las sequedades en nueve días. En once días seguidos de tratamiento empieza a fortalecer el pelo en pacientes que sufren su caída. Recuperar el pelo perdido exige varios tratamientos de once días según resultados y cabezas y también sirve como fijador. «No hay más que taparse la cabeza con una toalla para no manchar la almohada. Lo ideal es aplicarlo un par de horas antes de acostarse».
Funcionamiento sencillo
El funcionamiento del elixir es sencillo: «Esto es una crema que antes de acostarte te la aplicas en todo el cuero cabelludo, con los dedos, jeringuilla o spray. Masajeas con las manos. Queda como gomina fuerte. A la mañana siguiente, cuando te levantas te duchas si quieres o lo dejas como gomina y haces vida normal». Los tratamientos duran de nueve a once días seguidos «para ver resultados eficaces buenos». Hace falta un par de meses para ver resultados ya tangibles, pero el tratamiento completo es de año y medio o dos años. A todo el mundo le sale pelo, más tarde o más pronto, pero le sale».
Busca distribuidores
Está buscando distribuidores para llevar el producto a «farmacias, peluquerías, parafarmacias y herboristerías». Está hecho a base de huevo, aceites, alcohol y agua. «A la gente que tiene stress o que le viene el problema de herencia, les funciona también. Hay chicas jóvenes a las que les falta pelo y tienen luego unas capas tremendas. También combate la caída, la caspa...».
La distribución de momento se hará por vía directa, a través del teléfono (630) 16 78 60 o a través de Crecepeloleonardo. blogspot. com que es su página web. «Quiero sacar otros modelos de presentación y estoy pendiente de que me lleguen las cajas. Ya tengo hecho el registro de la patente a nivel mundial. La saqué a los quince días de lanzar el producto porque vi que era el futuro». Y ahora ya hace planes: «Sé seguro que voy a tener que montar una fábrica y comprar maquinaria. Vivo en Montejos del Camino pero produzco en Armellada. Si no alcanzo cerca de cien distribuidores este año, no voy a tener ninguno. Tengo muchos ejemplos que me confirman que esto funciona».
Poco tiempo
Coronas, entradas, escasez y caídas de pelo son los problemas más frecuentes. «Hay quien pasa de probar nada, porque se ven ya como imposibles, creen que son causas perdidas. Al principio no te creían. Ahora me funciona más cuando lo vendo que cuando lo regalo». El frasco cuesta 48,40 euros. Una persona normal necesita seis botes al año como mínimo. Para controlar la caída o poner el pelo fuerte «con dos botes al año sobre». En dos o tres años, el problema está resuelto».
Analiza los productos de la competencia de pasada. «No los he mirado mucho, solamente sé que no funcionan y este sí. Los hay que tienen productos incluso perjudiciales. «Los americanos fueron los primeros que lo investigaron».
Tiene claro cuál es el problema de los productos de la competencia. «Casi todos producen efectos secundarios y hay gente metiéndose cada cosa que espanta. Yo no, yo sé que lo mío funciona seguro y que no tiene ninguna contraindicación. Ahora de momento estoy volcado en la tarea de darlo a conocer y en los medios de comunicación. Pero no tardando me tendré que plantear montar una fábrica a nivel más serio, porque la producción va a ser muy importante».
Cuenta con la preceptiva autorización de actividades de instalación de cosméticos desde septiembre del año pasado y fija la base de su laboratorio en León. Y ya tiene, sobre todo, deformación profesional. Analiza detalladamente toda cabellera andante que le pasa por delante para prescribir el tratamiento más idóneo a cada caso. Está claro, de tonto no tiene un pelo. Ni tampoco los tiene en la lengua por la manera en la que se explica. «Yo sé que habrá mucha gente que piense que este es un producto más. Cuando empiecen a ver cómo funciona, ya veremos qué opinan».