Se trata de una construcción muy característica, por fuera y por dentro, llena de peculiaridades que os contamos seguido, con planta de
cruz griega superpuesta sobre una cuadrada y un foso (ambos elementos pocos comunes) y cuatro
fachadas separadas por
torreones. En general por fuera da la sensación de
castillo de cuento gracias a las
torres, pero al entrar esto cambia y sentimos que estamos en un edifico más orientado al culto que a festines. Como da mucho de sí, para no volverte loco, estas son algunas de las partes más peculiares de su
arquitectura que decíamos antes: