Las precipitaciones se reparten de forma irregular a lo largo del año, con escasez de las mismas en
verano, concentrándose al final del
otoño, en los meses invernales y al principio de la
primavera. La altitud sobre el nivel del
mar, su elevada situación sobre el entorno y su
exposición a los vientos favorecen un ambiente generalmente fresco gran parte del año, siendo especialmente desapacible en
invierno y primavera. Según la clasificación climática de Köppen,
Astorga se encuadra en la variante Csb, es decir clima mediterráneo de
veranos suaves, con la media del mes más cálido no superior a 22 °C, pero rebasando los 10 °C durante cinco o más meses. Se trata de un clima de transición entre el mediterráneo (Csa) y el oceánico (Cfb). La ciudad cuenta con una
estación meteorológica ubicada en el paraje de El Sierro, dependiente de la Agencia Estatal de Meteorología.