Sin embargo sí se conservan algunas piezas encontradas en el entorno catedralicio. Otras se hallan en manos de particulares. Se muestran en el
museo o en la propia
iglesia soportes, arquerías,
capiteles, ábacos, ménsulas, cornisas, etc.; todas estas piezas son de alta calidad artística cuyos autores son conocedores de las nuevas tendencias en la Europa occidental del siglo xii. Se conservan también algunos objetos artísticos como una talla de la
Virgen y un broche.