La imagen titular,
Virgen de la Majestad, es de comienzos del siglo xii, en madera de peral policromada en temple y chapada en plata. Mide 120 x 41 x 37 cm. Está sentada sobre un trono, sirviendo ella misma de trono a su hijo Jesús. El modelo iconográfico es de Kyriotissa bizantina (Kyriotissa o trono del Señor) en que sostiene sobre sus piernas al Niño, como si fuera un trono. Mantiene en su mano derecha el símbolo de la manzana (alusión a la nueva Eva) mientras señala con su mano izquierda a Jesús. El Niño lleva túnica y va calzado, siendo este detalle un precedente sobre este modelo
románico. Es una imagen-relicario, con el hueco ubicado en la espalda donde se encontraron a raíz de la restauración de 1988 unos paquetitos identificados por cartelas que indicaban ser astillas de la Vera
Cruz y leche de María.