Frente a la
capilla de
Santa Teresa, en el siguiente arcosolio y sobre un soberbio
retablo rococó del siglo XVIII., se venera a la
Virgen de Guadalupe, de gran devoción mexicana. La tabla pintada representa fielmente la milagrosa advocación mexicana del Tepeyac. En la parte inferior, en pequeños óvalos, se reproducen las secuencias de la
historia del indio Juan Diego que fue beatificado bajo el pontificado de Juan Pablo II. El origen de esta devoción en
Astorga proviene del deán don Miguel Fernández Cacho, nacido en
México. En la parte superior del retablo y en el centro, un Niño Jesús de la Pasión del siglo XVIII, muy expresivo e interesante