Kike Pachón que razón tienes. El trabajo de la mujer en aquella época era muy difícil, no había las comodidades de hoy aún me acuerdo cuando mi madre o mi abuela lavaban la ropa en el carraspal, el reguero del tarancón o en el río. Los remiendos de los mineros verdaderas obras de arte. cuidar a los hijos, comida, ganado, etc, etc. Se merecen no un homenaje sino cientos de ellos por tanto sufrimiento. Saludos.