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CABOALLES DE ARRIBA: Diario de la III marcha negra / Sergio Díez Álvarez...

Diario de la III marcha negra / Sergio Díez Álvarez
Pueden fallar las piernas pero el ánimo va a seguir hasta el final

Estiramientos (sobre estas líneas) y descanso en lo alto del puerto de La Magdalena de Sergio Díez, el minero que relatará para La Crónica el día a día de la III Marcha. MAURICIO PEÑA
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Nos pueden fallar las piernas pero el ánimo va a seguir hasta el final, hasta que lleguemos a Madrid, hasta que consigamos una solución, que es de lo que más ganas tenemos todos y por lo que hacemos esto. Ánimo no nos va faltar porque ayer, al salir de Villablino, nos dieron mucho nuestros familiares, nuestros amigos, nuestros vecinos y todos los habitantes de estos pueblos que, como nosotros, saben perfectamente que el fin de la minería sería también el fin de toda la comarca. Hace 20 años, cuando salió la primera Marcha Negra hacia Madrid, yo tenía 12 años y, como se suele decir, estaba a lo mío. A lo suyo está ahora mi hijo, Izan, aunque le he explicado que tengo que luchar por mi trabajo porque en Madrid hay un señor que me lo quiere quitar.
De Villablino salimos 48. Un chaval de la zona leyó un comunicado muy emotivo, y también emotivas fueron las palabras que nos dedicó la alcaldesa. Cantaron el ‘Santa Bárbara Bendita’ y había mucha gente llorando. Luego, empezamos a darle zapatilla, que es a lo que estamos. El calor no apretó tanto como temíamos y la verdad es que hemos venido bastante rápido. La gente dice que a este ritmo no aguantamos, pero hay muchas ganas de demostrar que estamos luchando por el pan de nuestros hijos, de llegar a Madrid y a donde haga falta. Al llegar a Murias de Paredes nos recibió también mucha gente. La alcaldesa nos dedicó algunas palabras... y también se acordó del ministro. Tenemos buena fonda: la antigua cárcel. Nos dieron un bocadillo de jamón estupendo y ahora nos están preparando una cena que también será estupenda: caldereta. Hay ganas, así que os dejo y mañana os cuento desde Riello cómo ha ido el día.