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León Diario de un minero en marcha
Estamos más motivados que nunca, si quieren guerra la tendrán
Los mineros de la Marcha Negra a su entrada en la localidad de Medina del Campo. ICAL
Sergio Díez Álvarez
La verdad es que después de la tempestad, a veces llega la calma. O por lo menos esa es la sensación que tengo después de esta etapa donde el calor ha sido infernal, y aunque ha sido más corta que las anteriores, se nos ha hecho más larga. Ha sido la etapa de los sindicatos. Los peces gordos han querido estar con nosotros y nos han mandado mensajes de apoyo y de ánimo. Todos sabemos ya lo que está pasando. y lo cierto es que la estrategia que quiere utiliza el Gobierno no le va a salir nada bien.
Nos han dicho que en la reunión que el ministro mantuvo con los sindicatos llegó en tono chulesco. Así no vamos a ninguna parte. Les debió comentar que como vamos cantando lo de guerra, guerra, guerra, lo que vamos a tener es eso, guerra. Si eso es lo que quiere el canario, es lo que va a tener porque nosotros estamos más motivados que nunca y vamos a llegar a Madrid con todas las consecuencias.
En cuanto a la etapa en sí, lo que hemos pasado los días atrás han sido una broma. Le ha pegado con conocimiento. Los pies han sufrido mucho, y a pesar de que ya están hechos a la carretera se nos han hinchado. Ahora lo que manda es el hielo tras la etapa. Un compañero de Villablino ha tenido que abandonar, aunque no pasa nada porque tenemos banquillo y lo cierto es que te da gusto cuando te encuentras con sorpresas como la de esta jornada cuando un grupo de compañeros de la empresa en la que trabajo (HBG) han decidido hacer la etapa con nosotros y eso te da mucho ánimo, aunque la falta de la familia te deja destrozado y es cuando te llegan esos momentos de bajón que no sabes como afrontar. Solo pensar en que estamos en esta lucha por el futuro de mi familia y de mis hijos es suficiente argumento para dar el siguiente paso.
En Medina ha sido increíble. No exagero si digo que el recibimiento ha sido similar como por las calles de León. La gente está con nosotros y eso se nota cada día. No me cansaré de repetirlo. Estamos en tierra de campos pero la sensación que transmiten es que sienten la minería y el conflicto que estamos teniendo. Si lo entiende la gente, es una batalla más que tenemos ganada ante un Gobierno que mira hacia otro lado y que no quiere ver la realidad de lo que está ocurriendo, no solo en nuestro sector, sino en toda España.
Quiero descansar, recuperar y que mis pies estén listos para la jornada de mañana. Es otra de las etapas largas, pero cada vez estamos más cerca de nuestro objetivo. Madrid se va a preparar para recibirnos, aunque los que gobiernan igual siguen mirando hacia las Canarias.
Estamos más motivados que nunca, si quieren guerra la tendrán
Los mineros de la Marcha Negra a su entrada en la localidad de Medina del Campo. ICAL
Sergio Díez Álvarez
La verdad es que después de la tempestad, a veces llega la calma. O por lo menos esa es la sensación que tengo después de esta etapa donde el calor ha sido infernal, y aunque ha sido más corta que las anteriores, se nos ha hecho más larga. Ha sido la etapa de los sindicatos. Los peces gordos han querido estar con nosotros y nos han mandado mensajes de apoyo y de ánimo. Todos sabemos ya lo que está pasando. y lo cierto es que la estrategia que quiere utiliza el Gobierno no le va a salir nada bien.
Nos han dicho que en la reunión que el ministro mantuvo con los sindicatos llegó en tono chulesco. Así no vamos a ninguna parte. Les debió comentar que como vamos cantando lo de guerra, guerra, guerra, lo que vamos a tener es eso, guerra. Si eso es lo que quiere el canario, es lo que va a tener porque nosotros estamos más motivados que nunca y vamos a llegar a Madrid con todas las consecuencias.
En cuanto a la etapa en sí, lo que hemos pasado los días atrás han sido una broma. Le ha pegado con conocimiento. Los pies han sufrido mucho, y a pesar de que ya están hechos a la carretera se nos han hinchado. Ahora lo que manda es el hielo tras la etapa. Un compañero de Villablino ha tenido que abandonar, aunque no pasa nada porque tenemos banquillo y lo cierto es que te da gusto cuando te encuentras con sorpresas como la de esta jornada cuando un grupo de compañeros de la empresa en la que trabajo (HBG) han decidido hacer la etapa con nosotros y eso te da mucho ánimo, aunque la falta de la familia te deja destrozado y es cuando te llegan esos momentos de bajón que no sabes como afrontar. Solo pensar en que estamos en esta lucha por el futuro de mi familia y de mis hijos es suficiente argumento para dar el siguiente paso.
En Medina ha sido increíble. No exagero si digo que el recibimiento ha sido similar como por las calles de León. La gente está con nosotros y eso se nota cada día. No me cansaré de repetirlo. Estamos en tierra de campos pero la sensación que transmiten es que sienten la minería y el conflicto que estamos teniendo. Si lo entiende la gente, es una batalla más que tenemos ganada ante un Gobierno que mira hacia otro lado y que no quiere ver la realidad de lo que está ocurriendo, no solo en nuestro sector, sino en toda España.
Quiero descansar, recuperar y que mis pies estén listos para la jornada de mañana. Es otra de las etapas largas, pero cada vez estamos más cerca de nuestro objetivo. Madrid se va a preparar para recibirnos, aunque los que gobiernan igual siguen mirando hacia las Canarias.