LILITH.
¿QUIEN ES LILITH?.
Según la tradición judía, Lilith es esa mujer que precedió a Eva, y que vivió con ADÁN en el EDEN hasta que decidió abandonarlo, una vez lejos de Adán, se convirtió en un demonio que rapta a los niños en sus cunas por la noche y una encarnación de la belleza maligna así como la madre del adulterio. Fue pues, la primera mujer de ADÁN.
En la Biblia apenas se menciona este hecho, se limita a una única mención. Aparece en Isaías34:14:
Más allá de esta tradición hebrea, el origen del mito de Lilith parece contar con raíces sumerias o acadias. En concreto había en Mesopotamia, según el arqueólogo británico Reginald Campbell Thompson, un grupo de demonios femeninos derivado de la criatura Lilitú con unas características que responden a esta figura mitológica: eran mitad humanas y mitad divinas, usaban la seducción y el erotismo como armas; y la noche era su hábitat natural. En cualquier caso, tenían las cualidades de lo que luego se ha representado como los vampiros, aunque cubiertos de pelo, y derivaban de la palabra «espíritu». Esta tradición habría pasado más tarde a la cultura judía a través de los semíticos residentes en Babilonia. Los judíos adaptaron así al hebreo el nombre de esta criatura maligna.
En este sentido, existe otra interpretación que presenta a Lilith como una criatura igual a Adán, hecha de polvo puro, que se rebela contra los designios divinos y muestra un marcado carácter. En el Alfabeto de Ben Sira (escrito entre el siglo VIII y el XI), se narra cómo Lilith se resistió a yacer por debajo de Adán: « ¿Por qué he de yacer debajo de ti? Yo también fui hecha con polvo y por tanto, soy tu igual», afirmó Lilith, que, al ser forzada por Adán a obedecerle, pronunció el nombre de Dios en vano y decidió abandonar el Edén con dirección al Mar Rojo.
Esta versión de Lilith se ha emplazado como una representación de las mujeres canaaneas y su visión de las relaciones sexuales en un periodo, hacia el 586 a. C, en el que se fusionaron parcialmente los panteones propios de los canaanitas con los hebreos. De esta manera, la demonización de Lilith es una crítica a las prácticas de las mujeres canaaneas dadas a mantener relaciones sexuales pre-matrimoniales y a una sexualidad más abierta que la mostrada por las hebreas. Lilith es el demonio rebelde, el mal ejemplo que precedió a Eva, más obediente a lo que Adán esperaba de una mujer. No en vano, algunas de las cualidades de esta versión de Lilith parecen haberse inspirado en el principal culto femenino de los canaanitas –el pueblo que según el Antiguo Testamento conquistaron los judíos tras el éxodo por el desierto.
Tras abandonar el paraíso, Lilith se asentó en la costa del Mar Rojo. Esta región se caracterizaba, según esta tradición mitológica, por la presencia de innumerables demonios, con los cuales engendró nuevas criaturas, «a razón de más de cien por día». Ante este hecho, Dios envió a un grupo de ángeles para exigirla que volviera con Adán: «Regresa con Adán de inmediato o te ahogaremos». A lo que ella respondió que ya no podía regresar porque «Dios me ha ordenado que me haga cargo de todos los recién nacidos, de los niños hasta el octavo día de vida (el de la circuncisión) y de las niñas hasta el vigésimo día». Finalmente, Dios permitió vivir a Lilith, pero la castigó haciendo que cientos de sus hijos demoniacos perecieran cada día. Desde entonces, la hermosa criatura se propuso matar a todos los hijos de Adán y a todas las madres durante el nacimiento y los días siguientes al parto.
¿Tendrá esto algo que ver con el hecho de que el vicepresidente segundo del gobierno, ha elegido como asesora a LILITH?
¿QUIEN ES LILITH?.
Según la tradición judía, Lilith es esa mujer que precedió a Eva, y que vivió con ADÁN en el EDEN hasta que decidió abandonarlo, una vez lejos de Adán, se convirtió en un demonio que rapta a los niños en sus cunas por la noche y una encarnación de la belleza maligna así como la madre del adulterio. Fue pues, la primera mujer de ADÁN.
En la Biblia apenas se menciona este hecho, se limita a una única mención. Aparece en Isaías34:14:
Más allá de esta tradición hebrea, el origen del mito de Lilith parece contar con raíces sumerias o acadias. En concreto había en Mesopotamia, según el arqueólogo británico Reginald Campbell Thompson, un grupo de demonios femeninos derivado de la criatura Lilitú con unas características que responden a esta figura mitológica: eran mitad humanas y mitad divinas, usaban la seducción y el erotismo como armas; y la noche era su hábitat natural. En cualquier caso, tenían las cualidades de lo que luego se ha representado como los vampiros, aunque cubiertos de pelo, y derivaban de la palabra «espíritu». Esta tradición habría pasado más tarde a la cultura judía a través de los semíticos residentes en Babilonia. Los judíos adaptaron así al hebreo el nombre de esta criatura maligna.
En este sentido, existe otra interpretación que presenta a Lilith como una criatura igual a Adán, hecha de polvo puro, que se rebela contra los designios divinos y muestra un marcado carácter. En el Alfabeto de Ben Sira (escrito entre el siglo VIII y el XI), se narra cómo Lilith se resistió a yacer por debajo de Adán: « ¿Por qué he de yacer debajo de ti? Yo también fui hecha con polvo y por tanto, soy tu igual», afirmó Lilith, que, al ser forzada por Adán a obedecerle, pronunció el nombre de Dios en vano y decidió abandonar el Edén con dirección al Mar Rojo.
Esta versión de Lilith se ha emplazado como una representación de las mujeres canaaneas y su visión de las relaciones sexuales en un periodo, hacia el 586 a. C, en el que se fusionaron parcialmente los panteones propios de los canaanitas con los hebreos. De esta manera, la demonización de Lilith es una crítica a las prácticas de las mujeres canaaneas dadas a mantener relaciones sexuales pre-matrimoniales y a una sexualidad más abierta que la mostrada por las hebreas. Lilith es el demonio rebelde, el mal ejemplo que precedió a Eva, más obediente a lo que Adán esperaba de una mujer. No en vano, algunas de las cualidades de esta versión de Lilith parecen haberse inspirado en el principal culto femenino de los canaanitas –el pueblo que según el Antiguo Testamento conquistaron los judíos tras el éxodo por el desierto.
Tras abandonar el paraíso, Lilith se asentó en la costa del Mar Rojo. Esta región se caracterizaba, según esta tradición mitológica, por la presencia de innumerables demonios, con los cuales engendró nuevas criaturas, «a razón de más de cien por día». Ante este hecho, Dios envió a un grupo de ángeles para exigirla que volviera con Adán: «Regresa con Adán de inmediato o te ahogaremos». A lo que ella respondió que ya no podía regresar porque «Dios me ha ordenado que me haga cargo de todos los recién nacidos, de los niños hasta el octavo día de vida (el de la circuncisión) y de las niñas hasta el vigésimo día». Finalmente, Dios permitió vivir a Lilith, pero la castigó haciendo que cientos de sus hijos demoniacos perecieran cada día. Desde entonces, la hermosa criatura se propuso matar a todos los hijos de Adán y a todas las madres durante el nacimiento y los días siguientes al parto.
¿Tendrá esto algo que ver con el hecho de que el vicepresidente segundo del gobierno, ha elegido como asesora a LILITH?