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CAMPO DE LA LOMBA: Podemos, ya que estamos en la fuente, seguir el camino...

Podemos, ya que estamos en la fuente, seguir el camino hacia arriba, apenas diez minutos y tendremos la Llastra a nuestros pies. Roca oscura. Es como una verruga entre el verde monótono del roble; allí terminaba la presa que traía el agua desde el nacedero del rió, desde la Salsa de Rosales. Allí, a los pies de esa roca la precipitaban hacia “la mina”, situada abajo, a la vera del río. No creo que se vean restos, el monte lo tapa todo. Hasta hace poco se conservo parte de los edificios y una gran cascajera con restos de antimonio y piritas (si recuerdo bien) y se apreciaba, desde el lado de los pueblos, los canales perpendiculares bajo la Llastra, hasta desaparecer al pie del Negro.
Esta presa, inundada de maleza y algún derrumbe, pero transitable algunos tramos (hace unos años, casi toda con un poco de flexibilidad) tiene una perdida de cota mínima, constante desde el nacimiento, y pasa por zonas donde solo el buen humor permite construir con semejante maestría…… bueno, y supongo que algo de estudio de ingeniería también.
Por el crudo invierno, los vecinos de estos pueblos, para ganar unas perrillas, se pasaban la noche “patrullando” la presa, para romper con palos el hielo y que no se interrumpiera la corriente de agua. Seguro que alguno sabrá la historia mejor que yo, a mi me pillo con la reestructuración industrial terminada...... y abandonada.
Aquí, creo recordar que lavaban el mineral y tenían las “dependencias” (se ve en la foto)…. la mina en realidad esta un poco antes (presa arriba) en monte de Santibáñez, y como el resto, esta absorbido por la naturaleza prácticamente todo. Aunque bien es verdad, que había barias prospecciones por todo el monte, con mas o menos fortuna.
Entre el Sistiadero y la Llastra, existe un trozo de monte, donde aparte de robles de tamaño “majo” se pueden ver matas de acebo, bajo la bóveda que producen los “majos”.
Había un camino, que partiendo de la fuente, terminaba bajo las rocas y sobre el campar, pero decir que exista hoy es arriesgar algún aventurero a “rozar” como los jabalís.
Al lado de “las puentes” (en plural porque cada chopo era uno…y serian chopas…digo) esta lo que quede del molino. Edificio espartano, de techo de losa, que a mas de uno le quito de una mojadura por tormenta, o de una granizada. Si veías las cosas “negras” te arrimabas al molino, por si acaso. Por cierto que hoy, como el trasiego de personal pedestre es muy numeroso; se ponio un hermoso puente de madera…. con sus tablillas y su canesú, justo donde antes estaban las “chopas”. Los rapaces, ya no perderán el vértigo mas, y quitaron la “emoción”; para los profanos diré que la distancia de las chopas al agua seria de unos......... ¡70 cms!............. bueno, a lo mejor exagero, dejémoslo en 50. Pero que sabrás tu, amigo lector, de la distancia "medida" con 5 años; si, con 5 años se iba con las vacas, porque el defensor del menor estaba en estudio; la verdad es que los bichos (inteligentes ellos), no te hacían ni puñetero caso, pero con perro, palo y ganas de correr......... las traías al "loro". ¿Os imaginais hoy un rapá con........? Vamos a dejalo.
En este punto, “junto las puentes de campo” existe un nudo “intermodal sur” (le podríamos llamar) desde donde parten (perdón, partían) caminos para muchos sitios: para el pueblo, para Santibáñez, para Inicio “por este lao”, para los praos (entre monte y praos), para unir con el que sube a Andarraso o baja a Inicio; río arriba para “las puentes” de Santibáñez, entre los praos y las tierras, porque al lado del monte, esté se precipita brusco contra el río y no hay camino.............

¡Coñes Miguel!........... ves como aunque no se fume (¡que no; que no se fuma!) Una foto se puede aprovechar; por eso, una vez mas........... GRACIAS. Y......................
.............................. ............ ¡TUNDIO OMAÑA!........................ ....... SIEMPRE.
Respuestas ya existentes para el anterior mensaje:
Bien, rapá, bien. Lo de los 70 cm creo que exageras, pero a lo corto. Tenía su qué muy grande atravesar el río y los dos chopos estaban bastante más altos. Aquel rapá le echaba mucho de lo que había que echarle para ir a pastorear al "Pazonero".

Un abrazo.