Y un día cambio todo, nuevos
paisajes pero los mismos dolores
borrachos de vino, no bebido, ese vino caliente que manca la cabeza.
Si el Rhin fuera el Omaña, no estaríamos aqui, emborrachados de vino y cerveza
al vernos nos dijimos, guaje que haces tu aquí?, como si fuera una casualidad el habernos encontrado