Un gran árbol, el fresno, impresionante por su corpulencia y por su robustez, y una gran persona, Constancio. Forman una pareja de mus inigualable, y al fondo una legión de chopos castellanos, obedeciendo sus órdenes en el juego de naipes.
Hermoso árbol y más cuando es el nombre de mi apellido, el cual procede de Palanquinos y Campo de Villavidel. Un saludo al autor de la foto desde Barcelona