Nada nos puede impedir sentir esta maravillosa felicidad de ser preferidos a otros. El placer es felicidad de los locos, la felicidad es placer de los sabios.
El que cae desde una dicha bien cumplida, poco le importa cuán hondo sea el abismo. Ningún hombre es feliz a menos que crea serlo.
Muchas personas se pierden las pequeñas alegrías mientras aguardan la gran felicidad. El que cae desde una dicha bien cumplida, poco le importa cuán hondo sea el abismo.
No está la felicidad en vivir, sino en saber vivir. Hay momentos en los que todo va bien: no te asustes, no duran.
No hay más que una manera de ser feliz: vivir para los demás. No está la felicidad en vivir, sino en saber vivir.
La felicidad es una estación de parada en el camino entre lo demasiado y lo muy poco. No hay más que una manera de ser feliz: vivir para los demás.
¿Qué es la felicidad sino el desarrollo de nuestras facultades? La felicidad es una estación de parada en el camino entre lo demasiado y lo muy poco.
Puede que lo que hacemos no traiga siempre la felicidad, pero si no hacemos nada, no habrá felicidad. ¿Qué es la felicidad sino el desarrollo de nuestras facultades?
Vivir para los demás no es solamente una ley de deber, sino también una ley de felicidad. Puede que lo que hacemos no traiga siempre la felicidad, pero si no hacemos nada, no habrá felicidad.
Carecer de algunas de las cosas que uno desea es condición indispensable de la felicidad. Vivir para los demás no es solamente una ley de deber, sino también una ley de felicidad.