Si el hombre procurase ser tan bueno como procura parecerlo, conseguiría su objetivo. Cuando soy buena, soy buena; cuando soy mala, soy mucho mejor. La culpa la tiene sólo el tiempo. Todos los hombres se tornan buenos, pero ¡tan despacio! Debe uno ser pobre para conocer el lujo de dar. Das poco cuando das tus posesiones. Es cuando das de ti mismo cuando realmente das.