La casa de la Romería. La presa pasaba por debajo. En mis sueños infantiles pensaba que haciendo un agujero en el suelo se podían pescar truchas perfectamente sin que te pillasen los guardias. En aquella presa solo había peces que cojías en un pozo que tenía el Maragato para regar, los metías en un frasco y al día siguiente estaban muertos, por mucha respiración artificial que les aplicases.
Juan.
Juan.
Y tanto que pasaba por debajo, allí a la orilla ibamos a lavar la ropa, y tambien había una compuerta que dejaba pasar el agua hacia la casa del cartero, ylavábamos a la sombra, debajo de un gran sauce que había.
Ya nada está igual, pero siempre estará en nuestros recuerdos.
Carmina R.
Ya nada está igual, pero siempre estará en nuestros recuerdos.
Carmina R.
Carmina, ayer había tantos mensajes cuando entré que al terminar de leerlos, mi hija me quitó el portátil porque lo necesitaba y no pude contestarte. A mi esa presa también me trae muchos recuerdos. Mis padres tenían una huerta hacia la mitad del camino. Una vez me encontre entrelas hierbas un nidal y cuando le llevaba los huevos a mi madre, me tropecé con un mozo que venia en una bicicleta, todo peripuesto (supongo que iba a ver la novia) y se los estampé en el traje;! que olor el que despedía! tuvo que volver a casa a lavarse. Yo creo que no se lo ha conseguido sacar del cuerpo. Hasta la noche