CANALES: La sabiduría nos llega cuando ya no nos sirve de nada.

La vida no es sino una continua sucesión de oportunidades para sobrevivir.

Lo más importante que aprendí a hacer después de los cuarenta años fue a decir no cuando es no.

Me desconcierta tanto pensar que Dios existe, como que no existe.

Era inevitable: el olor de las almendras amargas le recordaba siempre el destino de los amores contrariados.

La sabiduría nos llega cuando ya no nos sirve de nada.