Qué respondería una piedra si le insultaras? Nada. Pues imita a la piedra y hazte sordo a los insultos. Así como los ejercicios gimnásticos robustecen los músculos, así también quien nos insulta y zahiere vigoriza nuestra paciencia, mansedumbre y compasión - Epicteto
¡Mariiiiiiiiiiiiiii!