Hola Jesús, yo si que me acuerdo de tu abuela Piedad y de Dámaso, él, hombre tranquilo y parece que lo estoy viendo subir con su moto por la cuesta hacia casa para comer y después bajar para el trabajo, ¡un buen hombre!, los recuerdos floran al ver las fotos que se van poniendo y vienen a la memoria, con nostalgia pero con mucho cariño de lo vivido, un abrazo, Emilio