Queridos Calecheros: Esta semana intento volver a lo cotidiano y no quiero que pase un día más sin dar las gracias más exhaustivas a todos por haber hecho posible este último Calecho y encuentro forero.
Por circunstancias ajenas (y menos gratificantes que vuestra compañía, os lo aseguro), no he podido disfrutar de vosotros todo lo que hubiera querido… Lola y Fermi, cuánto me hubiera gustado repetir la comida del año pasado, como mis invitadas de honor… pero no ha podido ser… No dudo que vendrán tiempos mejores. Parece que estoy viviendo una especie de dictadura de lo inmediato que me lleva estresada de aquí para allá sin pasar por la serenidad.
Pero en la tarde del Calecho he disfrutado de esas historias que al evocarse ocasionan una carcajada o una agridulce alegría. Historias que aleccionan, que te hacen sentir orgullosos de quienes las protagonizan, de quienes te la cuentan y hasta de estar ahí poniendo las orejas para que te la cuenten. Y es que hay gente entre nosotros que narra de corazón para que nada de lo importante se olvide.
Fue una tarde preciosa que quiero agradeceros. Hemos disfrutado del regalo de la palabra de calecheros nuevos: Tuti, Manoli, Ofelia, Susana, Mª Luisa, Lili…
Permitidme que haga un pequeño apunte sobre los relatos de nuestros calecheros. De los que conocíamos del año pasado… pues en su línea… pero siempre en ascendente… mejorando.. con más tablas. Hasta nuestro querido Emilio se permitió meter algún comentario de su propia cosecha. Cada año estás más suelto en el escenario, Emilio!
El pregonero fue un acierto, supo llevarnos por los vericuetos de su memoria y la nuestra, situándonos en los inicios del edificio del cine –la Sindical- y haciendo la comparativa entre aquella vida y la actual… Pepín el Dominico nos lo ha presentado con palabras sabias y espíritu abierto. Nos lo ha contado todo sin tapujos. Sin duda ayudó a crear un momento mágico, en el que cualquiera de nosotros hubiéramos dado un ojo, un pie y hasta el alma por volver a entonces. Nos llevó de la mano por la nostalgia, que dicen los que saben, que es una mezcla de la añoranza entre lo que fue y lo que no pudo ser.
El relato de Ofelia puso un punto enternecedor al Calecho. Ya en los ensayos llegaba a emocionar y emocionarnos… llegando al final casi sin aliento… en un ahogo. Me di cuenta que su familia la tiene arropada, mimada… fijaros que ví, en el ensayo, a su hijo lanzarse en su ayuda con un “tranquila, mamá!”. Y no os lo perdáis… el marido de Ofelia me dejó sobrecogida por la generosidad de sus gestos y la altura de sus sentimientos cuando al finalizar el Calecho saludó y felicitó a mi madre a la que llegó a conocer a través del escrito-homenaje y se mostró feliz de haberla conocido… y creedme, lo hizo con sentimiento. Ofelia, mi enhorabuena! Cuentas con dos pilares fundamentales en los que apoyarte y eso es una garantía.
El relato de Mª Luisa, “Un mar de espuma blanca” nos llevó a través de la práctica del lavado en tiempos de nuestras madres a la conclusión de que eran de otra pasta… duras como el acero. Fue un relato precioso. Desde el momento que lo colgó en el foro, me gustó… muy, muy descriptivo.
En cuanto a Lili, qué os puedo decir…. Si escribiendo es un encanto, en persona se supera a sí misma. Hemos pasado de imaginarla a vivirla… Es cariñosa y cercana. Se emocionó con el homenaje que este Calecho mantenía en secreto para darle una sorpresa, y nos dedicó unas palabras preciosas recogiendo el cariño a nuestro pueblo que su padre le inculcó. Los organizadores tenían que haber colgado un aviso: “Cuidado. Peligro de cateterismo por nostalgia”. No se ha cansado de repetir cuánto nos quería. Sólo con un vistazo nos ha puesto nombre a cada integrante del foro. Lili contagia ilusión, franqueza, autenticidad... Compartir un rato con ella, compensa, os lo aseguro. …
A Manoli, a Tuti y a Susana no las llegué a tratar por una cierta timidez al no creerme conocida por ellas debido a mi escasa participación en el foro. Siempre tengo la intención de volver a ser contertuliana pero al final me quedo leyendo tras los matojos. Me he vuelto voyeur.
Quiero aprovechar igualmente para felicitar y dar las gracias a una persona que hizo posible este encuentro. Así que esto va por ti, CORAL.
Pocos de los que por aquí asoman se habrán dado cuenta de lo mucho que te has movido junto con Yoli y José Ángel (Secre+Presi) para que este encuentro un año más funcionara.
Yo te observo en la distancia y no puedo por menos que darte las gracias. MILLONES DE GRACIAS CORAL… por el ejemplo que supones, porque verte da vida, porque mirarte a los ojos de cerca descarga penas, porque has dado lecciones de criterio, cariño y señorío.
Coral ha apechugado con críticas y sinsabores… y siempre la he visto con la mejor de sus sonrisas acompañada de abrazos sinceros. Chapeau!
También el Presi y la Secre apechugaron lo suyo… y también les debemos el éxito de este encuentro. He notado al Presi con un pie fuera… (ojalá que no). Ellos han contribuído a mantener la esperanza diaria cuando no había razones en ciertos días para encontrarla.
Ojalá que no olvidemos nunca que aquí siempre encontraremos un amigo, un abrazo, un café caliente, palabras calurosas e historias amables… y hasta una buena ración de arroz con bogavante de nuestra querida Teso!
Un abrazo para todos, Mariajesús Morla
Por circunstancias ajenas (y menos gratificantes que vuestra compañía, os lo aseguro), no he podido disfrutar de vosotros todo lo que hubiera querido… Lola y Fermi, cuánto me hubiera gustado repetir la comida del año pasado, como mis invitadas de honor… pero no ha podido ser… No dudo que vendrán tiempos mejores. Parece que estoy viviendo una especie de dictadura de lo inmediato que me lleva estresada de aquí para allá sin pasar por la serenidad.
Pero en la tarde del Calecho he disfrutado de esas historias que al evocarse ocasionan una carcajada o una agridulce alegría. Historias que aleccionan, que te hacen sentir orgullosos de quienes las protagonizan, de quienes te la cuentan y hasta de estar ahí poniendo las orejas para que te la cuenten. Y es que hay gente entre nosotros que narra de corazón para que nada de lo importante se olvide.
Fue una tarde preciosa que quiero agradeceros. Hemos disfrutado del regalo de la palabra de calecheros nuevos: Tuti, Manoli, Ofelia, Susana, Mª Luisa, Lili…
Permitidme que haga un pequeño apunte sobre los relatos de nuestros calecheros. De los que conocíamos del año pasado… pues en su línea… pero siempre en ascendente… mejorando.. con más tablas. Hasta nuestro querido Emilio se permitió meter algún comentario de su propia cosecha. Cada año estás más suelto en el escenario, Emilio!
El pregonero fue un acierto, supo llevarnos por los vericuetos de su memoria y la nuestra, situándonos en los inicios del edificio del cine –la Sindical- y haciendo la comparativa entre aquella vida y la actual… Pepín el Dominico nos lo ha presentado con palabras sabias y espíritu abierto. Nos lo ha contado todo sin tapujos. Sin duda ayudó a crear un momento mágico, en el que cualquiera de nosotros hubiéramos dado un ojo, un pie y hasta el alma por volver a entonces. Nos llevó de la mano por la nostalgia, que dicen los que saben, que es una mezcla de la añoranza entre lo que fue y lo que no pudo ser.
El relato de Ofelia puso un punto enternecedor al Calecho. Ya en los ensayos llegaba a emocionar y emocionarnos… llegando al final casi sin aliento… en un ahogo. Me di cuenta que su familia la tiene arropada, mimada… fijaros que ví, en el ensayo, a su hijo lanzarse en su ayuda con un “tranquila, mamá!”. Y no os lo perdáis… el marido de Ofelia me dejó sobrecogida por la generosidad de sus gestos y la altura de sus sentimientos cuando al finalizar el Calecho saludó y felicitó a mi madre a la que llegó a conocer a través del escrito-homenaje y se mostró feliz de haberla conocido… y creedme, lo hizo con sentimiento. Ofelia, mi enhorabuena! Cuentas con dos pilares fundamentales en los que apoyarte y eso es una garantía.
El relato de Mª Luisa, “Un mar de espuma blanca” nos llevó a través de la práctica del lavado en tiempos de nuestras madres a la conclusión de que eran de otra pasta… duras como el acero. Fue un relato precioso. Desde el momento que lo colgó en el foro, me gustó… muy, muy descriptivo.
En cuanto a Lili, qué os puedo decir…. Si escribiendo es un encanto, en persona se supera a sí misma. Hemos pasado de imaginarla a vivirla… Es cariñosa y cercana. Se emocionó con el homenaje que este Calecho mantenía en secreto para darle una sorpresa, y nos dedicó unas palabras preciosas recogiendo el cariño a nuestro pueblo que su padre le inculcó. Los organizadores tenían que haber colgado un aviso: “Cuidado. Peligro de cateterismo por nostalgia”. No se ha cansado de repetir cuánto nos quería. Sólo con un vistazo nos ha puesto nombre a cada integrante del foro. Lili contagia ilusión, franqueza, autenticidad... Compartir un rato con ella, compensa, os lo aseguro. …
A Manoli, a Tuti y a Susana no las llegué a tratar por una cierta timidez al no creerme conocida por ellas debido a mi escasa participación en el foro. Siempre tengo la intención de volver a ser contertuliana pero al final me quedo leyendo tras los matojos. Me he vuelto voyeur.
Quiero aprovechar igualmente para felicitar y dar las gracias a una persona que hizo posible este encuentro. Así que esto va por ti, CORAL.
Pocos de los que por aquí asoman se habrán dado cuenta de lo mucho que te has movido junto con Yoli y José Ángel (Secre+Presi) para que este encuentro un año más funcionara.
Yo te observo en la distancia y no puedo por menos que darte las gracias. MILLONES DE GRACIAS CORAL… por el ejemplo que supones, porque verte da vida, porque mirarte a los ojos de cerca descarga penas, porque has dado lecciones de criterio, cariño y señorío.
Coral ha apechugado con críticas y sinsabores… y siempre la he visto con la mejor de sus sonrisas acompañada de abrazos sinceros. Chapeau!
También el Presi y la Secre apechugaron lo suyo… y también les debemos el éxito de este encuentro. He notado al Presi con un pie fuera… (ojalá que no). Ellos han contribuído a mantener la esperanza diaria cuando no había razones en ciertos días para encontrarla.
Ojalá que no olvidemos nunca que aquí siempre encontraremos un amigo, un abrazo, un café caliente, palabras calurosas e historias amables… y hasta una buena ración de arroz con bogavante de nuestra querida Teso!
Un abrazo para todos, Mariajesús Morla
Amiga M. Jesús! ¡cuánto me alegro de leerte, nuevamente, por este calecho!.. guapaaaaa...
Para Fermi y para mi, SÍ que es un HONOR tenerte a nuestro lado, querida amiga, pero no te preocupes, ya te pillaremos en otra ocasión.. jajaja. quizás el próximo año. Esas "sobras" como tú dices, ricas, ricas.. riquíiisimas para nosotras "son verdaderos manjares".
Lo que más deseo es qye "todo se te solucione de la mejor manera".
Ya disfrutaremos juntas, en otra ocasión, que hay muchas.
Un abrazo muuu grande para tí y para toda tu familia.
"Te queremos"... muaaaaa
Lola, Lolita de Alicante... jajaja
Para Fermi y para mi, SÍ que es un HONOR tenerte a nuestro lado, querida amiga, pero no te preocupes, ya te pillaremos en otra ocasión.. jajaja. quizás el próximo año. Esas "sobras" como tú dices, ricas, ricas.. riquíiisimas para nosotras "son verdaderos manjares".
Lo que más deseo es qye "todo se te solucione de la mejor manera".
Ya disfrutaremos juntas, en otra ocasión, que hay muchas.
Un abrazo muuu grande para tí y para toda tu familia.
"Te queremos"... muaaaaa
Lola, Lolita de Alicante... jajaja
Lola buenos dias/tardes.
hola guapooooooooooo
Hola preciosa, que talel calor por Alicante?
Lola te ha ido?
Lolin, noooooooo, estoy en mi currito, aqui "jodia"... jajaaa
pero contenta............ jaaaaaaaaaaaaaaa
pero contenta............ jaaaaaaaaaaaaaaa
Lolita, en mi currito tendré que estar yo a partir de mañana.... buuuuuuuuuuuuuua.
Hola M. Isabel, qué tal estáis?.. y tus nietinas?
Pues mañana, "a jode....... se---------".. jajaja
Pues mañana, "a jode....... se---------".. jajaja
Hola Lolita, no seas mala.. y no digas palabrotas... jajaja, mis nietinas preciosas las dos.. bueno yo que voy a decir....
M. Isabel, es que ahora esta llegando la "hora de salir"... jajajaja