El vuelo
Desde el pico más alto de la montaña unos ojos color de ámbar rastrean lo más profundo del valle. El cuerpo se contrae y sale disparado como una bala; a veinte metros del suelo despliega sus alas y extiende sus patas. Cuando va a rozar el suelo, sus garras se clavan en la pequeña presa, que siente tal terror que no nota cuando es llevada por el aire.
Su corazón hace unos segundos que ha dejado de latir.
Mari Blanco
Desde el pico más alto de la montaña unos ojos color de ámbar rastrean lo más profundo del valle. El cuerpo se contrae y sale disparado como una bala; a veinte metros del suelo despliega sus alas y extiende sus patas. Cuando va a rozar el suelo, sus garras se clavan en la pequeña presa, que siente tal terror que no nota cuando es llevada por el aire.
Su corazón hace unos segundos que ha dejado de latir.
Mari Blanco