CANALES: Gracias Diego y gracias Jose A. por publicarlo, no...

Diego José González López de León - 16/08/2011 (hijo mayor de Pilarina y Toño)

Canales o un pueblo en la red. Internet es una herramienta que no deja de sorprendernos cada día, pero lo que ha sucedido en este pueblo con la red de redes merece una mención especial. En una época en la que las nuevas tecnologías y la modernidad han devorado todo lo que tenía que ver con lo tradicional, el magnífico soporte que ofrece a los usuarios el portal “Pueblos de España” ha propiciado que lo virtual y moderno se fusione con lo tradicional. Hace más de tres años que algunos usuarios localizaron este pueblo -su pueblo- en este portal, y comenzaron a intercambiar experiencias y recuerdos, y fueron tantas y tantas las entradas registradas que se convirtió en el pueblo virtual que más mensajes había registrado. Fue un efecto llamada que corrió como la pólvora de casa en casa y que llegó incluso a familias del pueblo que habían emigrado a Argentina o Francia, o que se encontraban en puntos muy lejanos del país, y que gracias a ello pudieron asomarse al balcón de su pueblo y saber de lo actual y recordar de lo de antaño. Internet había proporcionado una plataforma en la que cada uno aportaba y contaba, y del mismo modo que alguien se acordaba del cura del pueblo, otra escribía sobre sus vivencias en una escuela de brasero y sabañones, u otro recordaba la caza de un lobo que le había contado su abuelo… todas ellas cosas y vivencias que de otra forma es muy probable que muchos de nosotros no hubiésemos conocido. Dentro de ese amalgama de vivencias alguien recordó que esto mismo que se estaba haciendo virtualmente era lo que los mayores del pueblo hacían en las frías noches de invierno mientras las mujeres “filaban”: se organizaba un calecho en el que cada uno contaba una historia, un cuento, una anécdota,… todo ello puesto en común y al calor de la lumbre. De todas las sinergias de las gentes que componían este grupo de foreros surge la idea de representar un calecho en el que se recuperen las mejores historias escritas en el foro, y este año ya van por la tercera edición. Cada año son más las personas que se interesan por esta iniciativa que, lejos de los individualismos y los intereses personales, a modo de “facendera” y en trabajo comunal nos hacen cercanas esas historias y mantienen vivo el recuerdo de las gentes del pueblo que ya no están entre nosotros, ya que este calecho es también una especie de homenaje colectivo a todos nuestros mayores, esas mentes enciclopédicas conocedoras de saberes y remedios, refranes y decires, y todas aquellas cosas de las que hoy, nosotros, somos en realidad deudores. Vaya por delante la felicitación a todos y cada uno de los integrantes de este foro por esta iniciativa por curiosa, original, colectiva y desinteresada, por hacer de lo moderno un pretexto para recuperar lo antiguo, por acercarnos a los jóvenes la sabiduría de nuestros mayores, por mantener vivo el recuerdo de un pueblo en el que, al menos, durante una hora, no echamos en falta a nadie porque parece todos están allí presentes,… y gracias en especial este año a la pregonera, cuyos recuerdos de infancia de tardes de río y escapadas en bicicleta me han hecho volver la vista a esas meriendas de agosto a base de pan y mantequilla con azucar. ¡Viva el Calecho!

Gracias Diego y gracias Jose A. por publicarlo, no lo había encontrado.
Respuestas ya existentes para el anterior mensaje:
A nuestro eminente reporteo, un millón de gracias, a Mari, un abrazo muy fuerte y a Pili lo mismo, que gusto charlar con ella. Espero que ya esté en Alemania, cansadilla, pero contenta.
Claro, yo tambien lo busqué y no lo encontré