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Soy Diego, el hijo de Toño y de Pilarina, y desde esta familia queremos transmitiros nuestro agradecimiento ante vuestras muestras de apoyo y cariño en estos momentos. Allá donde esté mi padre seguro que estará leyendo todo esto y emocionandose ante vuestra calidad humana, y seguro que seguirá riéndose como solía hacer con vuestras historias y aventuras de calecho. Un abrazo muy afectuoso de nuestra familia.
Querida Pilarina, muchas gracias por tu llamada de ayer y por ir hoy a misa a Canales en compañía de tus hijos, amiga. Eres muy especial para todos nosotros, muchos ánimos y fuerzas, sabes que te apreciamos de corazón, tanto a tí como a David y Diego.
Al final sacó fuerzas para ir a misa, me alegro. Pilarina, un abrazo.
