Sábado, 29 de diciembre de 2012
Portada > León
INFRAESTRUCTURAS
La provincia de León mantiene todos sus trenes de media distancia
Después de enero se negociará la posible reducción de las frecuencias
Imagen de archivo de una de las líneas ferroviarias de media distancia que une León con Gijón a través de la Montaña Central leonesa. J. J. PORRAS
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Silván dice que habrá alternativas a las líneas que se cierren o reduzcan
D. Rubio / León
Mucha expectación (más bien temor) se había generado en la provincia de León en torno al último Consejo de Ministros del año. En lo que se refiere a infraestructuras ferroviarias, alcaldes de las zonas afectadas (especialmente de la montaña central, puesto que la León-Gijón estaba en el punto de mira) estaban muy pendientes de los recortes de Mariano Rajoy, que en lo que se refiere a servicios ferroviarios finalmente no afectaron a ninguna de las líneas de media distancia que pasan por la provincia.
Todas ellas superan el baremoque se ha empleado para la supresión de las deficitarias y que la ministra Pastor ya había adelantado a los sindicatos: El criterio general adoptado es la declaración como obligación de servicio público de todas las relaciones con un aprovechamiento superior al 15%. No obstante, algunas en las que éste se sitúe entre el 10 y el 15% también podrán declararse como tal, teniendo en cuenta criterios de cohesión y vertebración territorial. No es el caso de ninguna de las líneas de media distancia que transcurren por la provincia, entre las que destacan la mencionada León-Gijón, la León-Ponferrada y la León-Palencia-Valladolid, entre otras. Se mantienen también las dos líneas más importantes de vía estrecha, las que Feve mantiene entre Guardo y León y también entre León y Bilbao.
El plan se ha desarrollado siguiendo criterios objetivos de eficiencia social, medioambiental y económica. En la actualidad hay servicios ferroviarios que muestran importantes ineficiencias. El 51,7% de los trenes se destinan a cubrir servicios que sólo utiliza un 16% de los viajeros y presentan un aprovechamiento inferior al 15%. En estos servicios de menor aprovechamiento, se dan casos en los que el Estado llega a aportar hasta 371 euros por billete, frente a los 11 euros que paga el viajero.
Una vez conocida la noticia de que ningún tren leonés se verá afectado por los recortes, queda pendiente de negociación la previsible reducción de su frecuencia, que se acometerá en reuniones que tendrán lugar a lo largo del mes de enero entre el Ministerio de Fomento y la Junta. “De las subvenciones que cada comunidad autónoma pueda aportar a cada línea dependerá el mantenimiento o la reducción de las frecuencias”, aseguró ayer a este periódico el responsable de UGT transporte en Castilla y León, Pedro Aller.
Ahora, Fomento deberá formalizar antes del 30 de septiembre de 2013 con Renfe Operadora el contrato de servicio público en el que se reflejen las condiciones en que se habrán de ejercer dichas obligaciones de servicio, así como los mecanismos para su compensación.
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El plan se ha desarrollado siguiendo criterios objetivos de eficiencia social, medioambiental y económica. En la actualidad hay servicios ferroviarios que muestran importantes ineficiencias. El 51,7% de los trenes se destinan a cubrir servicios que sólo utiliza un 16% de los viajeros y presentan un aprovechamiento inferior al 15%. En estos servicios de menor aprovechamiento, se dan casos en los que el Estado llega a aportar hasta 371 euros por billete, frente a los 11 euros que paga el viajero.
Una vez conocida la noticia de que ningún tren leonés se verá afectado por los recortes, queda pendiente de negociación la previsible reducción de su frecuencia, que se acometerá en reuniones que tendrán lugar a lo largo del mes de enero entre el Ministerio de Fomento y la Junta. “De las subvenciones que cada comunidad autónoma pueda aportar a cada línea dependerá el mantenimiento o la reducción de las frecuencias”, aseguró ayer a este periódico el responsable de UGT transporte en Castilla y León, Pedro Aller.
Ahora, Fomento deberá formalizar antes del 30 de septiembre de 2013 con Renfe Operadora el contrato de servicio público en el que se reflejen las condiciones en que se habrán de ejercer dichas obligaciones de servicio, así como los mecanismos para su compensación.