Lo que ocurre Toño es que la gente no se engancha al carro y siempre tirando de el l@s mism@s se cansa uno.
Por lo del carro tranquilo, que más tiran los que están dando el callo en la capi, que además de dedicación, tiempo y esfuerzo, todavía reciben escobazos.
Y, oye, que un escobazo (en sentido figurado, que luego pasa lo que pasa) bien dao y a tiempo, espabila las conciencias.