El límite de sorpresa ya lo tenemos desbordado, pero ya sólo faltaba que tuviéramos un hacker en la casa... En cualquier caso, borren o no borren mensajes siempre estarás en nuestros corazones y recordaremos tus escritos, tus dichos y tus poemas. Que el 2016 no te quite el sueño por estas cosas. Un abrazo.