No tengo palabras para espresar la pena que he sentido al enterarme de la muerte inesperado de Carlos. Nunca olvidare la visita que nos hicistes cuando estábamos pasando por momentos muy duros. Mil gracias por todos los buenos ratos compartidos y por haberte conocido. A Mari y su hijo todo mi cariño y un abrazo de consuelo. D. E. P querido amigo