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CASTROVEGA DE VALMADRIGAL: P. ISACIO RODRIGUEZ RODRIGUEZ...

P. ISACIO RODRIGUEZ RODRIGUEZ
(14 de septiembre de 1924 - 18 de diciembre de 2009)

Hombre entrañablemente familiar, Con referencias constantes a sus raices populares echadas en el pueblecito leoés de Castrovega de Valmadrigal
, donde nacio el 14 de septiembre de 1924. La cultura del agro pronto descubrió que no era lo suyo. Y bien lo supieron sus padres Clodomiro y Angela y su hermana Eulalia cuando lo despidieron al salr para la vecina Coyanza, donde cursó Latín y Humanidades (1938-914). Años bélicos que acarreaban penurias pero que fortalecieron voluntades. Luego pasó a la orilla del Pisuerga para estudiar Filosofía (1941-1945).
Al acabar el noviciado y profesar fue enviado al Colegio Internacional Santa Mónica de Roma para cursar Teología (1947-1950). Profesa de Votos Solemnes el 26 de julio de 1949 y es ordenado Presbitero el 25 de marzo de 1950, doctorándose en Historia Eclesiástica en la Huniversidad Ontificia Gregoriana en junio de 1953.
Laureado con saberes y títulos tornó a Valladolid para ejercer la docencia en las aulas del Estudio Teológigo, Agustiniano (1953-1963, 1970-1987). Casi una treintena de años de nagisterio por el que pasamos muchos discípulosy supimos de sus ilusiones y sus energias, así como de su cercanía y optimismo. Desl mismo centro fue Regente (1957-1963) y Director (1971-1972) en plena espiral postconciliar.
Aunque ya sabía cuál era u norte, su destino al Oriente reorientó su vida. A Manila viajó en 1963 y rápido se implicó en los preparativos del IV Centenario de la Evangelización del Archipiélago Magallçanico (1965), mereciendo sus esfuerzos el reconocimiento y premios otorgados por el Ministerio de Asunos Exteriores de España (1965-1968). Del Convento de San Agustín de Manila fue Prior (1967-1970) y contribuyó notablemente a hacer del mismo un foco de cultura y dofusión agustiniana.
Desde 1970 Valladolid fue su residencia conventual, aunque hay que decir también viajero incansable en busca de fuentes y libros becado po los gobiernos español, mejicano, o filipino, y otras por iniciativa personal escudriñó minucuosamente archivos y rebuscó afanosamente librerías.
Cuánto le gustaba tararear al P. Isacio "Por la ruta que abrió Urdaneta...". Siempre se sintió orgulloso de ser hijo de la "Gloria". Provincia de Filipinas y nadie como él ha contribuido a dar a conocer su historia y sus gentes. Ahí están esos 22 vlúmenes y un Manual, y otros cinc0 tomos de dicionarios biográficos de Filipinas. Iquitos y Venezuela... Prolífico articulista principalmente en revistas como Apostolado, Casiciaco, Religión y Cultura, Ciudad de Dios y Archivo Agustiniano.
Ya ha quedado dicho en el anterior escrito " Que la actividad intelectual del P. Isacio se centró, toda su vida en la investigación histórica".
Por su dedicación y conocimientos se forjó un prestigio y militó como miembro de renombradas instituciones como la Internacional Association of Historians of Asia (1964), National Historical Association (Manila 1967) y Correspondintes de la Real Academia de la Historia (1991). Participó también en una treintena de ongresos Internacionales y en otros muchos acionales.
Siempre activo y vital. Incansable madrugador para volcarse en el trabajo de teclear a máquina u ordenador. Así hasta la vísperas del tránsito. Su obsesión por Filipinas, los ibros, la Provincia... hizo que se olvidase de si mismo y se descuidase. Y su talla gigante se quebró por un pie de barro, que le encominó primero a la RAE en febrero de 2009 y posteriorment al Hospital Campo Grande, donde se le amputó. "Que sa lo que Dios quiea" repetía aquellas vísperas. Y Dios lo quiso para sí el 19 de diciembre, cuando contaba 85 años de edad y 63 de vida religiosa.
¡DESCANSE EN PAZ!
De la Revista TORNAVIAJE Nº 151 PARA CONOCIMENTO DE NUESTRO PUEBLO
MIMO