El cultivo de la remolacha fue introducido en Castrovega de Valmadrigal hace ya muchos años.
Se cultivaba en los campos de regadío del Sobrecastro, se regaba con el agua sacada con norias de los pozos hechos a pico y pala, hasta llegar a la peña que una vez rota esta como se podía se seguía con el pico y la pala, hasta llegar al agua. Con el progreso llegaron las moto bombas de gasolina que eran una maravilla.
Sigamos con la remolacha: Se sembraba en surcos la semilla. Como se sembraba habrá que tratarlo. El asunto es que nacían todas juntas y era una faena, sí, sí, una faena enorme para los riñones por que con la azada había que ir quitando las que sobraban para que cuando crecieran se hicieran enormes y calentaba el sol una barbaridad y esto no era lo peor dicen, por que yo lo otro no lo conocí y era arrancarlas gordísimas y en el invierno que hacia un frío que pelaba las orejas y todo lo demás.
Este seguramente fue el motivo por el cual las gentes fueron poco a poco abandonando los pueblos y la azucarera de León tuvo que cerrar pero no hay mal que por bien no venga y es que después de estar medio arruinada quieren hacer en ella el museo de arte contemporáneo de León o algo parecido.
Bueno chavales, esto es lo que yo aprendí de la remolacha ya que mis riñones no lo han olvidado.
Se cultivaba en los campos de regadío del Sobrecastro, se regaba con el agua sacada con norias de los pozos hechos a pico y pala, hasta llegar a la peña que una vez rota esta como se podía se seguía con el pico y la pala, hasta llegar al agua. Con el progreso llegaron las moto bombas de gasolina que eran una maravilla.
Sigamos con la remolacha: Se sembraba en surcos la semilla. Como se sembraba habrá que tratarlo. El asunto es que nacían todas juntas y era una faena, sí, sí, una faena enorme para los riñones por que con la azada había que ir quitando las que sobraban para que cuando crecieran se hicieran enormes y calentaba el sol una barbaridad y esto no era lo peor dicen, por que yo lo otro no lo conocí y era arrancarlas gordísimas y en el invierno que hacia un frío que pelaba las orejas y todo lo demás.
Este seguramente fue el motivo por el cual las gentes fueron poco a poco abandonando los pueblos y la azucarera de León tuvo que cerrar pero no hay mal que por bien no venga y es que después de estar medio arruinada quieren hacer en ella el museo de arte contemporáneo de León o algo parecido.
Bueno chavales, esto es lo que yo aprendí de la remolacha ya que mis riñones no lo han olvidado.